Grecia entra en la recta final para cerrar el nuevo plan de recortes
El Gobierno griego está en la recta final para cerrar el nuevo plan de medidas de ahorro por valor de al menos 11.500 millones de euros que le exige la troika (CE, FMI y BCE) a cambio del nuevo tramo de ayuda financiera, de 31.500 millones.
Las negociaciones, que se prolongan desde el pasado mes de julio, han entrado ya en sus últimos compases y se espera que el plan sea cerrado a principios de la próxima semana a más tardar, según han dado a entender las autoridades griegas.
En este sentido, para las 10.00 GMT de mañana (las 12.00 hora peninsular) está convocada una reunión entre el primer ministro griego, el conservador Andonis Samarás, y sus socios de Gobierno, el socialdemócrata Evángelos Venizelos y el centroizquierdista Fotis Kuvelis.
No obstante, la presentación de las medidas podría retrasarse debido al viaje de Samarás a Italia para entrevistarse con su homologo italiano, Mario Monti, y el papa Benedicto XVI, entre el jueves y el sábado.
El Gobierno griego continúa las negociaciones con los técnicos y los jefes de la misión de la troika, formada por la Comisión Europea (CE), el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), en periódicas reuniones con los diferentes ministros.
El plan "será el resultado inevitable de un compromiso dual", dijo Venizelos el martes respecto a esta negociación a dos bandas.
Especialmente los socios progresistas del Gobierno han presentado resistencia a las propuestas hechas por la troika de recortar las pensiones y los salarios públicos, por lo que han sido puestas sobre la mesa diversas medidas alternativas.
Entre ellas, está el aumento de la edad mínima de jubilación hasta los 67 años, a pesar de que al inicio de la crisis ya fue elevada hasta los 65 actuales.
De hecho, los medios griegos creen que cuando se presenten las medidas al Parlamento -algo previsto para finales de mes o principios de octubre-, algunos diputados de los partidos que apoyan al Gobierno se abstendrán o votarán en contra, aunque resulta muy difícil que hagan peligrar su aprobación ya que la coalición tripartita cuenta con 178 escaños de los 300 que componen la Cámara.
"Todos sabemos que esos 11.500 millones son un requisito. Se deben encontrar, lo primero, para permanecer en el juego, para permanecer dentro del desarrollo de los acontecimientos europeos ahora que Europea está cambiando hacia la buena dirección", declaró hoy a la cadena NET el ministro portavoz del Gobierno, Simos Kedikoglu.
Sin embargo, las nuevas medidas, si bien aún no se han publicado oficialmente, han despertado una gran polémica y han generado multitudinarias protestas, especialmente de los sectores que más se espera sean afectados por los recortes: doctores, bomberos, policías, jueces, militares y profesores.