_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Lonmin necesita expandirse

Lonmin necesita ir a lo grande, o retirarse. El tercer productor de platino del mundo estaba apurado, financiera y operacionalmente, antes de la muerte de 44 personas en su mina de Sudáfrica y de que se parara la producción. Ahora, en peligro inminente de incumplir sus compromisos de deuda, Lonmin necesita recuperar la iniciativa. Una emisión gigante de derechos sería arriesgada. Pero sin una gran inyección de fondos, el futuro de la minera se ve oscuro.

El presidente, Roger Phillimore, con razón, se ha centrado en la tragedia humana y en hacer que los trabajadores de la compañía vuelvan a sus puestos. Pero el anuncio del 21 de agosto de que podría acabar incumpliendo sus compromisos de deuda tan pronto como el mes que viene prueba que no se puede evitar la realidad financiera.

Lonmin puede pensar en ir a sus bancos a pedir auxilio. Pero Phillimore puede necesitar ir más allá. El sobrecargado balance de Lonmin y sus altos costes de producción le ha forzado a recortar los costes de capital a un nivel mínimo antes de la tragedia de la semana pasada. Sin una gran inyección de capital para financiar la necesaria expansión, Lonmin puede ser incapaz de apoyarse sobre una base sostenible, particularmente ahora que lidia con pérdidas por el cese de la producción y porque probablemente acabará pagando más a sus mineros.

El debate es que Lonmin puede necesitar 1.000 millones de dólares, una suma que se compara con una capitalización bursátil de solo 1.900 millones. El reciente caos hace que cualquier emisión de derechos no vaya a prosperar excepto con un gran descuento. La victoria sobre Xstrata, que intentó comprar la empresa en 2008, podría ser ahora un problema. Incluso si Lonmin puede aumentar su capital, podría no evitar un descenso de la demanda o a un exceso de oferta.

Pero Lonmin puede que nunca tenga una mejor oportunidad de alegar circunstancias especiales. El perfil de demanda de platino a largo plazo se ha fortalecido. Y Lonmin tiene acceso a unas ricas reservas. Dadas las alternativas, la reinversión puede ser una de sus pocas opciones.

Por Kevin Allison.

Archivado En

_
_