Alemania inicia en 2012 la implantación gradual de la jubilación con 67 años
Alemania iniciará en 2012 la implantación gradual de la jubilación a los 67 años, lo que, según expertos y sindicatos, implica un alto riesgo de incremento de la precariedad en la vejez en el futuro.
Según publica hoy el diario Süddeutsche Zeitung, un 47,5% de los que se jubilaron en 2011 lo hicieron sin haber alcanzado la edad legal, actualmente los 65 años, con una media de tres años y dos meses antes de lo que les correspondería. Ello implicó una reducción media de 113 euros en la pensión que perciben, ya que para la plena jubilación deben haberse pagado las cuotas al seguro obligatorio durante 45 años.
El porcentaje de jubilaciones anticipadas es solo levemente superior al de cinco años atrás (41,2%), pero supone un espectacular ascenso respecto al de 2000 (14,5%).
Las razones de esa tendencia creciente a jubilarse anticipadamente obedecen a las dificultades de encontrar un puesto de trabajo a partir de los 55 años, apuntan sindicatos y organizaciones sociales.
"Esta situación va a agudizarse con la implantación de la jubilación a los 67 años", advirtió la presidenta de la Asociación Social de Alemania (VdK), Ulrike Mascher.
Por parte sindical, Annette Buntenbach, miembro de la presidencia de la Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB), afirmó que "mientras no haya posibilidades reales de trabajar hasta los 65, retrasar la jubilación a los 67 equivale a aplicar un programa de recorte de las pensiones".
El diario muniqués basa sus informaciones en estadísticas del sistema alemán de pensiones. De acuerdo con esa fuente, la jubilación media que percibe un contribuyente que haya pagado sus cuotas los 45 años completos se sitúa en los 1.236 euros mensuales.
Las informaciones del rotativo coinciden con la entrada en vigor del progresivo aumento de la edad de jubilación a los 67 años. Ello implicará que, quienes cumplan los 65 el próximo 2012, deberán trabajar un mes más para acceder a la plena jubilación.
El proceso se realizará en 18 fases -es decir, un mes más a cada año que transcurrido-, de manera que se completará en 2029.
El aplazamiento de la edad de jubilación a los 67 años empezó a perfilarse en Alemania bajo el gobierno socialdemócrata-verde de Gerhard Schröder, quien incluyó ese objetivo en su programa de reformas estructurales Agenda 2010. La fórmula topó con una fuerte oposición en las propias filas socialdemócratas, por lo que no llegó a convertirse en proyecto de ley.
La canciller Angela Merkel activó el proyecto ya en su primera legislatura en gran coalición -es decir, entre su Unión Cristianodemócrata (CDU) y el Partido Socialdemócrata (SPD)-, que finalmente aprobó el Parlamento en 2007.
Se calcula que en Alemania hay unos veinte millones de jubilados, que se convertirán en 23 millones en 2029, mientras que la cifra de población laboralmente activa -entre 20 y 64 años- bajará de los actuales 50 millones a 45 millones en ese mismo periodo.