China "toma nota" del referendo griego y confía en el plan europeo de rescate
El Gobierno chino dijo hoy que había "tomado nota" de la decisión griega de celebrar un referendo sobre el plan de rescate europeo, y añadió que confía en que la Unión Europea (UE) pueda aplicar las medidas del plan acordado para resolver la crisis de la eurozona.
"China siempre valoró el desarrollo de la UE y de la eurozona y confía en que es capaz de abordar las dificultades. Si en el pasado lo fue, seguirá siendo un importante inversor en el mercado europeo además de estar dispuesta a encontrar vías con la UE que contribuyan a la solución de la crisis", afirmó el portavoz del ministerio de AAEE Hong Lei.
Hong reiteró hoy que "China trabaja con la comunidad internacional para impulsar el crecimiento y mantener la estabilidad financiera internacional" con su apoyo a los esfuerzos del Fondo Monetario Internacional (FMI) y la eurozona para superar la crisis.
Sin dar más detalles, el portavoz destacó que Pekín confía en que las medidas por la eurozona solucionen los problemas y se alcance la estabilidad necesaria.
La semana pasada en Atenas, el presidente del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPC), máximo órgano asesor, Jia Qinglin, dijo que China seguirá cooperando económicamente con Grecia y le ofrecerá nuevas propuestas para fortalecer un comercio bilateral que fue en 2010 de 4.350 millones de dólares (3.158 millones de euros), en aumento anual del 18,4 por ciento.
Las inversiones chinas en Grecia llegaron a 500 millones de dólares (363 millones de euros), e incluyen el alquiler por más de tres décadas de un muelle del puerto de El Pireo, mientras que las griegas en China ascienden a casi 100 millones de dólares (72,5 millones de euros).
Jia se pronunció a favor de impulsar la cooperación naviera con Grecia, el turismo y de explorar nuevas áreas de colaboración como el sector de las energías renovables.
El máximo asesor chino también destacó que entre las medidas europeas debería encontrarse el aumento de la exportación de alta tecnología a China y la creación de un ambiente de inversión favorable a las empresas chinas.
Pekín ha dicho que espera a conocer más detalles sobre el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) para tomar una decisión sobre nuevas inversiones en deuda soberana europea.
Expertos destacan que tal vez Pekín pida algo a cambio, como el reconocimiento de China como economía de mercado, o el cese de las presiones para que aprecie su moneda nacional, el yuan.
Otras peticiones a Bruselas podrían ser el levantamiento del embargo de armas impuesto tras los incidentes de la Plaza de Tiananmen en 1989, o incluso la participación de otros países emergentes del BRICS (integrado también por Brasil, India, Sudáfrica y Rusia) en el FEEF.