La prima de riesgo se aleja de máximos y cae a 255 puntos
Las primas de riesgo de España, Portugal y Grecia se relajaron ayer de forma notable. La buena acogida de la subasta de letras del país heleno, las nuevas compras de deuda del BCE, así como el compromiso de Japón de adquirir bonos europeos, permitieron el repliegue, y con él, las subidas en las Bolsas.
Después de los sobresaltos de las últimas sesiones, la calma regresó ayer al parqué. Tan solo es un paréntesis en la renovada crisis de deuda europea, pero al menos, sirvió para rebajar una tensión que empezaba a afectar seriamente a los países más castigados de la zona euro por sus necesidades de financiación.
El BCE se ha vuelto a ver obligado a sacar la chequera para aliviar la presión sobre dichos estados a través de su programa de compra de bonos. De esta forma, las primas de riesgo de España, Portugal o Grecia, consiguieron sacudirse la tensión y se redujeron tras un inicio de jornada realmente complicado.
Pero, además, los expertos no han dudado en señalar que tras este repliegue se encuentran otras razones. En especial, aluden al compromiso anunciado por Japón de comprar alrededor del 20% de los bonos que la eurozona emitirá a finales de este mes, con el fin de impulsar la confianza, así como al positivo resultado de la última subasta de letras a seis meses que celebró ayer Grecia. De esta forma, la prima de riesgo de España, tras tocar a primera hora los 275 puntos básicos, se redujo hasta los 255 puntos. De igual modo, la rentabilidad que se paga por los títulos españoles a 10 años también se rebajó, desde el 5,54% de la sesión anterior, su nivel más alto en la última década, hasta el 5,48%. Un comportamiento que se repitió igualmente en Grecia, Portugal, Bélgica o Italia.
Pero el mercado permanece en una situación de calma aparente. Parece convencido de que Portugal pedirá ayuda a la UE y al FMI, como ya hicieran Grecia e Irlanda tiempo atrás. Un extremo que las autoridades lusas ya han negado, pero que podría empezar a despejarse hoy mismo. Portugal celebra una subasta de bonos a cinco y diez años con los que espera colocar entre 750 y 1.250 millones de euros, y se presenta como una verdadera prueba de fuego. Prueba que mañana jueves deberá superar también España, con su primera subasta de deuda pública del año.
Como viene siendo habitual, la renta variable en España reaccionó con los movimientos del mercado de deuda. Así, con la fuerte bajada en la prima de riesgo, el Ibex afianzó ayer las subidas y consiguió apuntalar un rebote del 1,53% hasta los 9.582 puntos, poniendo fin a cuatro jornadas consecutivas de descensos. Las alzas se repitieron en el resto de plazas europeas y en Wall Street. El Dow ganó un 0,3%, el S&P 500 sumó un 0,37% y el Nasdaq un 0,3%.
El BCE vuelve a comprar un importante volumen de deuda
Tras reducir en gran medida la cuantía de sus compras de deuda durante el periodo navideño, el BCE se ha visto obligado a aumentar su programa de compra de bonos desde finales de la semana pasada, según informaron los expertos. "Al tiempo que las tensiones regresaban a los mercados y los spreads de deuda se volvían a ampliar, el BCE ha vuelto a intensificar su actividad compradora", explica Soledad Pellón, de IG Markets. "Gracias a ello, los spreads se han relajado a medida que ha evolucionado la sesión", remarca Pellón. Mañana España se examina ante el mercado, con la primera subasta de deuda del año. El Tesoro espera captar de 2.000 a 3.000 millones en bonos a 5 años.