Los mismos datos publicados hoy ponen de manifiesto que desde mediados de septiembre hasta el pasado viernes, este tipo de inversores rebajó su participación en ACS, Antena 3, Bolsas y Mercados Españoles (BME), Gas Natural, Grifols, Indra, Prisa, Red Eléctrica, Sos Corporación y Sacyr Vallehermoso.
Al mismo tiempo, estos inversores aumentaron su participación en Abengoa, Acciona, Acerinox, Amadeus, BBVA , Banco Sabadell, Banco de Valencia, Banco Popular , Bankinter, Gamesa, OHL y Tubacex.
No obstante, mantuvieron sus inversiones en Banco Pastor, Ferrovial , Iberdrola, Inditex, La Seda de Barcelona, Mapfre, Natra, Repsol , Técnicas Reunidas, Vocento, Zardoya y Zeltia.
El pasado 10 de junio, entraron en vigor las nuevas normas de comunicación de posiciones cortas por la que se obliga a poner en conocimiento de la CNMV estas posiciones.
De este modo, los cambios que supongan un aumento o disminución de una fracción del 0,1% del capital social del emisor en las posiciones iguales o superiores al 0,5% del capital deberán comunicarse y publicarse en el mercado.
Las posiciones cortas iguales y superiores al 0,2% del capital social del emisor deberán ser comunicadas al supervisor, pero no publicadas en el mercado, en tanto que las que alcancen o superen el 0,5% también deberán ser comunicadas tanto al supervisor como al mercado.
Las posiciones cortas -en España están prohibidas al descubierto, cuando no se poseen los títulos a vender- se toman cuando el operador o el inversor cree que el precio del activo está sobrevalorado y va a bajar, en cuyo caso procede a la venta de títulos con la intención de recomprarlos a un precio inferior y lograr así ganancias.