UGT acusa al Gobierno de ayudar a la patronal al fijar plazos en la reforma de los convenios
El secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, responsabilizó ayer al Gobierno de que la patronal no se siente con los sindicatos para reformar la negociación colectiva, al asegurar que el plazo de seis meses que fija la reforma laboral "desincentiva" a la CEOE.
"El que exista un plazo fijo en el que el Gobierno tenga que sacar una vez más un decreto está produciendo el efecto de que la patronal no se siente incentivada", lamentó Ferrer, quien afirmó que el tiempo "se administra" a favor de la patronal, tal y como, en su opinión, ya ocurriera con la reforma del mercado de trabajo. El vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, recordó el lunes que los agentes sociales disponen de solo cinco meses más de plazo para alcanzar un acuerdo.
Horas después, el secretario general de CEOE, José María Lacasa, descartó que la patronal esté tratando de diferir la negociación. "Hemos tenido que discutir los puntos de partida a nivel interno durante varias semanas, para asegurarnos de que todas las organizaciones miembros de la patronal comparten la postura de la dirección, pues se trata de un asunto de gran complejidad", explicó.
Lacasa avanzó además que "en los próximos días" se podrán iniciar los primeros contactos "a nivel técnico" para contrastar los puntos de partida de la patronal y los sindicatos mayoritarios respecto a la reforma de la negociación colectiva que impulsa la reforma laboral recientemente aprobada por el Parlamento.
Preguntado por si considera una intromisión el que Rubalcaba, emplazará ayer a CEOE a negociar con los sindicatos, Lacasa respondió que no le correspondía evaluar cómo se organiza el Ejecutivo de cara al diálogo social, y afirmó que la prioridad de la patronal es el "diálogo bilateral".