El Supremo de EE UU anula las condenas del ex primer directivo de Enron
El Tribunal Supremo de EE UU anuló ayer las condenas por fraude del ex magnate de la prensa Conrad Black y del ex directivo de Enron Jeffrey Skilling por considerar errónea la interpretación de la ley de "servicios honestos", y devolvió ambos casos a tribunales inferiores.
En su decisión argumenta que esta ley no podía ser aplicada para condenar a Skilling por su papel en el hundimiento de Enron.
Durante las sesiones orales celebradas en diciembre y marzo varios jueces parecían inclinados a limitar el uso de esta ley, que, según los críticos, es vaga en sus términos y ha sido empleada para convertir en delito errores y transgresiones en el mundo empresarial. El Supremo rechazó, no obstante, el argumento de la defensa de Skilling de que la "omnipresente cobertura mediática" impidió que su cliente tuviera un juicio justo en Houston, Texas, en 2006.
Skilling, ex consejero delegado de la firma energética Enron, que se fue a pique en 2001 en uno de los mayores fraudes corporativos de la historia estadounidense, pidió el año pasado al Supremo que revise su condena.
El ex empresario fue sentenciado en 2006 a 24 años de prisión y al pago de una multa de 45 millones de dólares tras ser declarado culpable de 19 cargos de fraude y conspiración relacionados con el hundimiento de Enron, con sede en el Estado de Texas.
En un auto prácticamente idéntico sobre la aplicación de la misma ley en un caso similar aunque no relacionado, el Tribunal Supremo también se puso del lado del ex magnate de prensa Conrad Black, que fue condenado en 2007 a seis años y medio de prisión y una multa de 125.000 dólares por el fraude de seis millones a Hollinger International (HI).