La CE expedienta a Areva por frenar la competencia
La Comisión Europea anunció ayer la apertura de una investigación sobre las restricciones a la competencia en el sector nuclear que la francesa Areva parece estar imponiendo a su rival alemana Siemens.
Tras una década de entendimiento, la guerra comercial y legal ha estallado entre Areva y Siemens, líderes europeos en el diseño y manufactura de componentes para las centrales nucleares.
El departamento de Competencia de la Comisión Europea, dirigido por el comisario Joaquín Almunia, anunció ayer que ha recibido una queja de la empresa alemana sobre las trabas a su actividad que parece estar poniéndole Areva.
El conflicto ha surgido después de que Siemens abandonara el año pasado la sociedad creada con Areva para operar de manera conjunta en el restringido mercado de la tecnología civil nuclear.
El presidente de Siemens, Peter Löscher, aseguró ayer en Madrid que "no existe ninguna posibilidad de que Siemens se eche atrás" en su decisión de salir de su consorcio con Areva. Por otro lado, descartó comentar los términos de la denuncia presentada en Bruselas.
Fuentes de Areva, sin embargo, indicaron que el problema ha surgido porque el antiguo acuerdo incluía una cláusula que prohíbe a Siemens competir con la francesa en ciertas áreas de negocio durante ocho años a contar desde el momento de la ruptura. Esa condición, según diversos medios franceses, está impidiendo a la compañía de Löscher llegar a un acuerdo con el grupo ruso Rosatom.
Areva asegura que la cláusula figuraba en el acuerdo original que fue notificado a Bruselas y que recibió el visto bueno de la Comisión en el año 2000.
El departamento comunitario de Competencia, sin prejuzgar la validez de la queja de Siemens, recalcó ayer que "la autorización del año 2000 fue válida mientras duró la sociedad conjunta, pero no después".
La investigación de Almunia, por tanto, se centrará en la actitud de Areva y, en particular, de la antigua sociedad conjunta, llamada Areva NP, a partir de la salida de Siemens.
La propia CE autorizó en mayo del año pasado, sin ninguna condición, que la compañía de Anne Lauvergeon se hiciera con el control completo de Areva NP.
Y hace 10 años, tras una investigación supuestamente exhaustiva, Bruselas también autorizó la sociedad conjunta original con la participación de Areva (entonces Framatone) y Siemens.
La luz verde se concedió con varias condiciones, entre ellas, que Eléctricité de France rompiera sus lazos accionariales con Framatone, empresa que hasta entonces era el principal suministrador de material nuclear del monopolio eléctrico francés.
Pero no se puso ninguna pega a la cláusula de no competencia que ahora genera el conflicto y se va a investigar durante meses.
Incentivar las renovables en España
El presidente de Siemens AG, Peter Löscher, felicitó, en su discurso en el Foro Nueva Economía celebrado ayer en Madrid, al Gobierno español "por su liderazgo en energías renovables", que le ha llevado a ser una de las tres potencias mundiales en generación con energías renovables, según explicó el presidente. Löscher instó al Ejecutivo a "seguir adelante con el trabajo". "No se detengan. Si es posible, aceleren", afirmó. Preguntado por el posible recorte a las primas de las energías renovables que el Gobierno está preparando, el presidente recordó que "los incentivos estimulan la actividad". "Es un sector muy joven que necesita industrializarse", afirmó.El máximo responsable de Siemens descartó que vayan a convertirse en fabricante de vehículos eléctricos "porque ese es el negocio de sus clientes". Aseguró que su apuesta es el desarrollo de las infraestructuras de las redes inteligentes. Además, alabó el compromiso "público y privado" con esta nueva tecnología.