Baile de ejecutivos en participadas por capital riesgo
Empresas controladas por estas sociedades de inversión han cambiado a su director general recientemente
Cuando César Bardají entró en Matutano, del grupo Pepsico, a mediados de los años ochenta del pasado siglo, la empresa que lideró el mercado español de patatas fritas pasó en poco tiempo de facturar 3.000 millones de pesetas a 30.000 millones. "Ahora Apax quiere que Bardají haga lo mismo en Panrico", asegura un conocido del consejero delegado de la compañía fabricante de Donuts. La sociedad de capital riesgo Apax, una de las mayores europeas, anunció el fichaje de Bardají el pasado mes de enero, tras la salida del anterior primer ejecutivo de Panrico, Joan Cornudella, fichado a su vez por el grupo Agrolimen. Apax adquirió Panrico en 2005 en una operación valorada en aproximadamente 900 millones. Bardají encara al frente de la compañía de alimentación la caída de consumo generalizada en España; la necesidad de la industria en la que trabaja de sacar continuamente al mercado nuevos productos y reducir costes; y la refinanciación de la deuda de la empresa, cercana a los 560 millones de euros.
Básicamente son los mismos retos que afrontan otros colegas de Bardají que en los últimos meses han sido colocados en la dirección general de grandes compañías españolas por las sociedades de capital riesgo propietarias de esas mismas empresas. Ya sea porque las compañías inician una nueva fase de expansión o porque la deuda que arrastran requieren la gestión de un profesional con un perfil más financiero, lo cierto es que varias empresas españolas participadas por capital riesgo han cambiado de primer ejecutivo en los últimos seis meses.
"Negociar durante meses, durante un año la refinanciación de la deuda de una compañía quema mucho", comenta el presidente de una de las mayores sociedades de capital riesgo que operan en España. "Dirigir la empresa en épocas de crecimiento, con créditos fáciles, a través de adquisiciones es mucho más divertido", recuerda.
"Negociar la deuda quema mucho", dice el presidente de una sociedad de inversión
Fondos controlados por las sociedades de capital riesgo Permira, PAI y CVC compraron en 2005 la cadena de moda Cortefiel a través de una opa de exclusión en una operación valorada en 1.500 millones de euros. A mediados del pasado año los fondos impusieron como consejero delegado de la compañía a Juan Carlos Escribano, en sustitución del belga Anselm van den Auwelant. Desde entonces la empresa ha firmado una nueva estructura del pago de su deuda, que ronda los 950 millones, y ha emprendido una nueva estrategia de negocio centrada en la potenciación de su ropa femenina, expansión internacional y el cierre de su marca Milano. Los tres fondos aportaron a finales del pasado año 100 millones de euros y pactaron con la banca acreedora ampliar el plazo de vencimiento del pago de la deuda hasta 2014.
El grupo Bodybell, integrado por las cadenas de perfumerías Bodybell, Juteco y la mayorista Cadyssa, ha anunciado esta semana el nombramiento de un nuevo presidente ejecutivo, Fernando de Vicente. El nuevo responsable de la gestión de la empresa "será el encargado de liderar el proyecto estratégico de crecimiento, modernización e integración de las dos enseñas del grupo, así como de la búsqueda de sinergias entre ambas", informó el grupo controlado por las sociedades de inversión Dinamia y Mercapital. En su último informe de valoración, Dinamia, la única sociedad de capital riesgo cotizada, indica que mantiene a cero la valoración de la compañía dado el impacto de la caída del consumo en los ingresos de la compañía. A 31 de diciembre de 2009, la deuda estimada de Bodybell era de 137,5 millones y el Ebitda del ejercicio pasado se situó en los 19,4 millones, frente a los 30,3 millones de 2008.
El grupo de distribución Dinosol ha sido otra de las compañías que recientemente ha cambiado a su primer ejecutivo. La empresa de supermercados, participada por Permira, nombró el pasado mes a Javier Puga nuevo presidente del grupo, en sustitución de Luis Gil. Ya en septiembre de 2009 Dinosol fichó como consejero delegado a Javier Pérez de Leza. El pasado mes de febrero el grupo refinanció más de 200 millones de deuda.
Miles de millones en proceso de refinanciación
Al igual que otros sectores de la economía española, el capital riesgo que opera en el país lleva cerca de dos años sumido en duras negociaciones para refinanciar su deuda. Los mayores procesos de refinanciación al que asiste en la actualidad el capital riesgo presente en España son posiblemente los de ONO, Amadeus y Panrico. ONO, controlada por fondos americanos, cuenta con un crédito sindicado de 3.600 millones aportado para la compra de los activos de cable de Auna. El grupo negocia su refinanciación tras haber rebasado, el pasado febrero, el plazo impuesto para lograrlo. Amadeus mantiene más de 3.000 millones de deuda. La central de viajes participada por Cinven y BC Partners estudia una salida a Bolsa, operación que en parte reduciría su endeudamiento. Panrico negocia también en la actualidad la refinanciación de 560 millones de deuda.Cortefiel, de CVC, Permira y PAI, refinanció el pasado año una deuda cercana a los 950 millones acordando el vencimiento para 2014.Dinosol, participada también por Permira, refinanció más de 200 millones el pasado mes de febrero.La sociedad española Dinamia admitió a finales del pasado año, en un informe con motivo de una ampliación de capital, que varias de sus participadas negociaban la refinanciación de su deuda.
Las cifras
560 millones es la deuda de Panrico, de Apax. César Bardají es consejero delegado desde enero.137,5 millones es la deuda de Bodybell (Mercapital y Dinamia). El grupo tiene nuevo presidente desde esta semana.200 millones debe Dinosol, de Permira. El mes pasado nombró nuevo presidente.