Las dificultades para esquivar una opa obligatoria por Sos
Cambium, que tantea la compra del 33%, no tiene fácil la exención
Hecha la ley, hecha la trampa. Aunque a veces no es tan sencillo encontrar algún resquicio para eludir la legislación. Es el caso de la ley de opas, que pone las cosas difíciles a aquellos que pretendan hacerse con una participación de control en el accionariado de una compañía (es decir, adquirir más del 30% del capital) sin verse obligados a lanzar una oferta por la totalidad de las acciones.
æpermil;ste es el objetivo inicial de la sociedad estadounidense Cambium que, bajo la dirección del español José de Diego Arozamena, está tanteando la posibilidad de hacerse con 33,5% del capital de Sos a través de una compleja operación que incluiría un acuerdo con sus bancos acreedores, además de una ampliación de capital y un canje de deuda y de participaciones preferentes. Un conjunto de requisitos que por sí solos complicarían la operación, más aún cuando Rothschild -quien asesora a los bancos acreedores- no ha mostrado ningún interés en aceptar la propuesta.
Pero ésta roza la inviabilidad a tenor del porcentaje de capital que pretende alcanzar. El 33,5% supera en 3,5 puntos porcentuales el límite sobre el cual es obligatorio lanzar una oferta pública de compra por el 100%. Y para lograr que la Comisión Nacional del Mercado de Valores exima de esta obligación "existen muy pocas opciones", según señalan fuentes jurídicas. "Por ejemplo, podrían argumentar que la toma de control es indispensable para la viabilidad de la compañía en cuestión", apuntan las citadas fuentes.
El Real Decreto de julio de 2007 sobre el régimen de ofertas públicas de adquisición de valores establece que no será obligatoria la formulación de una opa si se trata de "adquisiciones u otras operaciones procedentes de la conversión o capitalización de créditos en acciones de sociedades cotizadas cuya viabilidad financiera esté en peligro grave e inminente", según se recoge en el artículo 8.d.
En este mismo punto matiza que esta opción puede llevarse a cabo "aunque no esté en concurso, siempre que se trate de operaciones concebidas para garantizar la recuperación financiera a largo plazo de la sociedad". Además, señala que corresponderá a la CNMV acordar, en un plazo no superior a 15 días a contar desde la presentación de la correspondiente solicitud por cualquier persona interesada, que no resulta exigible una oferta pública. Es decir, primero habría que presentar la oferta y después lograr el respaldo del regulador bursátil para no tener que lanzar una opa por el 100% del capital.
Sin embargo, en el caso de Cambium ésta requiere el visto bueno previo del organismo presidido por Julio Segura. "Una operación de estas características requeriría la exención de opa obligatoria lo que no se ha consultado a la CNMV y podría hacer inviable este tipo de operación", aseguraba Cambium la pasada semana en el comunicado donde adelantaba sus intenciones.
Otra opción de exención de opa que recoge la ley es la compra de más de un 30% por parte de "fondos de garantía de depósitos en establecimientos bancarios, cajas de ahorro, cooperativas de crédito", entre otras instituciones. "La exclusión se extenderá a las tomas de control indirectas previstas (...) cualquiera que sea el porcentaje de voto que resulte de las referidas adjudicaciones, cuando a juicio de la entidad de supervisión competente, quien lo comunicará a la CNMV, tal exclusión resulte conveniente para garantizar el buen fin y viabilidad financiera de la operación de saneamiento", apunta el Real Decreto.
Pero no hay que obviar que, pese a las dificultades económicas que atraviesa Sos, hablar de la inviabilidad de la empresa es excesivo. Actualmente debe a más de medio centenar de entidades financieras 1.300 millones de euros. Sin embargo, Sos ha encargado a Credit Suisse la elaboración de un plan de reestructuración, así como las negociaciones con la banca acreedora. Hasta el 31 de mayo está en vigor un periodo de stand still que permite seguir dialogando con las entidades financieras a las que sólo devuelve los intereses de los préstamos y no el principal, que pretende posponer a un plazo de unos años.
El papel de vigilante del regulador bursátil
Es difícil vaticinar si las sociedades que han mostrado su interés por hacerse con el control de casi la tercera parte del accionariado de Sos tienen de verdad intención de compra o si sólo han lanzado el anzuelo por si existe alguna posibilidad. En cualquier caso, si la CNMV detectara que detrás de algún comunicado al regulador sólo existen filtraciones interesadas, que condicionen el normal funcionamiento del mercado, podría llegar a abrir un expediente sancionador. "Puede que no estemos en ese caso y que de verdad exista intención de hacer una oferta, aunque luego no se concrete, pero estoy seguro de que la CNMV está vigilando si hay otro tipo de intereses o si se trata de filtraciones interesadas", apunta un abogado de un prestigioso bufete madrileño que prefiere permanecer en el anonimato. "Eso sí, es muy difícil acreditar que sólo se trate de rumores interesados". Tanto en el caso de las manifestaciones de interés de compra de Nueva Rumasa como de la firma de inversión estadounidense Cambium, ambas enviaron sendos comunicados a la CNMV después de que la prensa especulara respecto a su interés por entrar en escena y participar en el futuro accionarial del grupo Sos.Tampoco hay que olvidar que la Ley del Mercado de Valores establece que "los emisores de valores, durante las fases de estudio o negociación de cualquier tipo de operación jurídica o financiera que pueda influir de manera apreciable en la cotización de los valores o instrumentos financieros afectados, tienen la obligación de limitar el conocimiento de la información estrictamente a aquellas personas, internas o externas a la organización, a las que sea imprescindible". De esta forma el regulador establece que todas aquellas personas vinculadas a este tipo de operaciones corporativas tienen un deber de confidencialidad. Y, en caso de que se altere la cotización por la difusión prematura, parcial o distorsionada de la operación deben "difundir de inmediato, un hecho relevante que informe, de forma clara y precisa, del estado en que se encuentra la operación en curso o que contenga un avance de la información a suministrar".
Las cifras
383,9 millones de euros es la capitalización actual de Sos en la Bolsa madrileña, después de que las acciones perdieran ayer un 2,5%, hasta los 2,50 euros el título.
1.300 millones de euros es la deuda de Sos con más de 50 entidades financieras, con las que actualmente negocia prorrogar en un plazo de seis años la devolución del principal de los créditos.