EE UU pide a los fondos bajistas con el euro que no destruyan los registros
El Departamento de Justicia de EE UU ha pedido a los hedge funds que apuestan contra el euro que no destruyan los registros de sus operaciones. La medida se produce mientras Europa investiga el papel de los hedge funds y los CDS en la crisis griega.
Las peticiones se han dirigido a algunos de los fondos de inversión que, el día 8 de febrero, se reunieron en Nueva York y, según informó el Wall Street Journal, decidieron apostar contra el euro. De acuerdo con la agencia Bloomberg, el Departamento de Justicia está exigiendo que se conserven los registros de las operaciones realizadas con la divisa europea.
Entre los comensales que asistieron a dicha cena se encontraban representantes de Greenlight Capital, Brigade Capital y Soros Fund Management. Durante las últimas semanas, y a medida que arreciaba la crisis griega, las posiciones bajistas contra la moneda europea han marcado un máximo tras otro en el mercado de derivados de Chicago. La semana pasada las posiciones netas de los inversores de perfil especulativo -de carácter financiero y de corto plazo- eran bajistas por un volumen de 71.000 contratos, un 20% que la semana anterior, que había supuesto otro récord histórico.
En paralelo, la Unión Europea está investigando si los derivados de crédito (CDS) han agudizado la crisis griega, según comentó anteayer el comisario de servicios financieros, Michel Barnier. Según Reuters, la Comisión está preguntando a miembros del mercado y a supervisores para examinar el papel de la especulación en la crisis.
La CNMV pide más transparencia en los mercados
El vicepresidente de la CNMV, Fernando Restoy, reclamó ayer de la Unión Europea una exigencia de mayor transparencia en las transacciones que se realizan al margen del mercado bursátil. Según Restoy, la revisión por la Comisión de directiva MiFID debe incluir la regulación de las crossing networks, plataformas de negociación de acciones cotizadas en circuitos privados, para evitar la competencia desleal que pueden ejercer sobre los mercados regulados o los sistemas multilaterales de negociación. La normativa actual, a su juicio, carece de requisitos de transparencia para las operaciones bilaterales, lo que hace que la UE disponga de información "escasa y de mala calidad".