"El riesgo de deuda soberana es nuestra principal preocupación"
Teme que las consecuencias a largo plazo sean más graves de lo que se espera
Matt King, estratega jefe de productos de crédito de Citi, mira el fuerte deterioro de las arcas públicas a nivel mundial con miedo. Cree que los Gobiernos lograrán capear la crisis y tranquilizar a los inversores de momento, pero augura un futuro muy complicado.
¿Cómo cree que pueden afectar los problemas de Grecia a otros países como España? ¿Dónde ve más riesgos de deuda soberana?
"Doy poca probablidad a una rebaja de rating al Reino Unido o EE UU"
El riesgo de deuda soberana es nuestra principal preocupación pero hay que diferenciar entre el corto y el largo plazo. En el corto plazo pensamos que la combinación de unos datos económicos mejores, buenos resultados empresariales, el inicio de la contratación por parte de las compañías, las promesas de los Gobiernos de reducir déficits y las compras de deuda por parte de los bancos harán que las cosas se tranquilicen. Lo malo es que para el largo plazo el problema es mucho mayor de lo que la gente se imagina.
¿Cómo de grave es la situación?
A largo plazo tenemos el problema del envejecimiento de la población. Por eso no sólo tenemos que frenar el aumento de los déficits. Debemos regresar a superávits y mantenerlos durante muchos años. Según cálculos del FMI si queremos estabilizar el nivel de deuda sobre PIB en el 60% para 2030, antes de que la población envejezca demasiado, la mayoría de las economías desarrolladas deberían tener un superávit que iguale la mejor cifra que hayan tenido en los últimos 40 años, pero además la deben mantener durante 15 años. Uno se pregunta cómo vamos a conseguirlo. Los impuestos probablemente aumentarían un 70%, necesitaríamos inmigración masiva y la edad de jubilación debería irse a los 75 años. No creo que los Gobiernos quieran darnos este mensaje en el corto plazo. Lo que escucharemos seguramente será que la economía debe coger tracción antes de que podamos afrontar estos problemas.
¿Entonces ve los riesgos el próximo año?
Creo que la mejora de la economía y la falta de presiones inflacionistas hará que la rentabilidad de la deuda gubernamental no repunte demasiado.
La curva de tipos indica que el mercado no espera subidas de tipos por un tiempo. ¿Está de acuerdo entonces?
Normalmente después de una crisis bancaria todo el mundo se concentra en pagar la deuda acumulada. Los datos de crédito en Europa y en Estados Unidos sugieren que eso está ocurriendo. Pienso que los bancos centrales no tendrán que subir los tipos durante un tiempo a no ser que el riesgo de crédito soberano estalle.
¿Qué puede ir mal el año que viene?
No tiene por qué ser el año que viene. Los problemas pueden estallar más adelante. Las complicaciones llegarán cuando las economías empiecen a recuperar y los Gobiernos tengan que cortar los gastos. Será difícil hacerlo porque la recuperación será frágil. Pero eso no lo veo este año todavía.
¿Cuál es su principal preocupación?
Sería realmente complicado si los Gobiernos empiezan a sufrir rebajas de sus calificaciones crediticias. Si las agencias de rating rebajaran al Reino Unido, por ejemplo, entonces los inversores internacionales y los bancos centrales no querrían comprar sus bonos, lo que implicaría que el pago de intereses se encarecería y acabaría generando rebajas adicionales.
¿Ve posible una rebaja al Reino Unido o a EE UU?
Le doy poca probabilidad. En la práctica creo que tanto las agencias de rating, como los Gobiernos como los inversores saben los riesgos que acarrearían las rebajas. Por lo que probablemente habrá suficiente presión para que se reduzcan los déficit y los inversores encuentren atractiva la deuda gubernamental, especialmente los bancos ya que tienen cada vez más presión de los reguladores para tener activos líquidos como deuda estatal.
España ya ha sufrido una rebaja cuando el Reino Unido está en una peor situación. ¿Le parece justo?
Sí y no. El problema es que España está en el euro. Esto evita la fuga de capitales y una crisis de mayor envergadura pero también implica que los efectos en salarios y precios son más dolorosos para salir de la crisis. El Reino Unido, por el contrario, tiene riesgo de fuga de capitales pero si se produce de forma gradual eso implica que la libra se debilita frente a otras divisas y aumenta la competitividad. Por eso hay ventajas e inconvenientes en la situación de cada uno.
¿Dónde ve las oportunidades de inversión en el universo de crédito?
Nos gustan todos los activos de riesgo y en particular los emergentes. En crédito tanto high yield como de grado de inversión.
¿No cree que los spreads de crédito ya se han estrechado demasiado?
Es cierto. Todos los tipos de activos están un poco caros para el momento de ciclo actual, pero también bastante baratos para como vemos la economía a lo largo del año. Para ponerlo en cifras. Los spreads para los bonos de alto riesgo están entre los 600 y los 700 puntos básicos. Esto es bastante caro teniendo en cuenta que la tasa de impago está en el 12% pero barato para el 5% que esperamos a mediados de año y el 3% que se baraja para el final del ejercicio. Por ello, a medida que vayan mejorando los resultados empresariales, los estrategas de renta variable podrán utilizar argumentos similares. Si los beneficios remontan un 20% las Bolsas pueden escalar otro 10%.
¿Hay riesgo de burbujas?
Sí, en mercados emergentes y en deuda soberana, aunque todavía no las vemos formadas. La siguiente crisis siempre se forma sobre el activo que más se endeudó en la expansión previa. Esta vez son los gobiernos. Los emergentes, por otra parte, están menos endeudados y en los próximos cuatro o cinco años serán uno de los principales captadores de flujos de inversión por sus mayores perspectivas de crecimiento.