La exportación y el pago a proveedores sostienen el 'factoring' en plena crisis
El factoring mantiene su actividad casi inalterada a pesar de la adversidad económica, según muestran los últimos de la Asociación Española de Factoring (AEF). El volumen de cesiones de pagos ascendió al acabar septiembre a 68.911 millones de euros, prácticamente la misma cantidad que un año atrás (-0,83%).
El factoring es el conjunto de servicios financieros que se articulan en torno a la compra de facturas. Es decir, una empresa cede a un banco o caja las facturas a su favor a cambio de que esta entidad le adelante parte de su importe.
Este negocio ha aguantado por la pujanza del factoring internacional, que creció un 32,88%, hasta 6.980 millones impulsado por el cobro de recibos por parte de empresas exportadoras (+41,13%).
En contraste, el factoring ligado a la actividad comercial en territorio nacional decreció un 11,14%, hasta 31.313 millones. Cayeron tanto los contratos con recurso (-7,36%), donde el cedente responde de la solvencia del deudor, como los que carecen de él (-11,78%), en cuyo caso el cliente sólo atestigua la existencia del crédito a cobrar.
Otro de los pilares sobre los que se sustenta la actividad de factoring es el trato con proveedores. Este negocio, que permite a las empresas subcontratar en una entidad financiera sus pagos a terceros, sumó contratos que suponían transacciones valoradas en 30.618 millones, un 5,6% interanual más.
Javier Rodríguez-Mantiñán, presidente de la AEF, reconoce que la crisis afecta al factoring, pero señala "que es un producto idóneo tanto para las empresas que necesitan circulante como para las entidades financieras, que lo prefieren a los créditos puros".