La Generalitat moviliza capital catalán para adquirir hasta el 80% de Spanair
La Generalitat verá finalmente satisfechas sus pretensiones de lograr un comprador catalán para Spanair tras el compromiso de la Cámara de Comercio de Barcelona, el Ayuntamiento de la ciudad y Catalana d'Iniciatives de adquirir la filial de SAS. Los futuros accionistas buscan socios catalanes para controlar el 80% de Spanair.
Solución catalana para Spanair. El grupo escandinavo SAS anunció ayer 'un principio de acuerdo' con un grupo de inversores catalanes, encabezado por la empresa de capital riesgo Catalana d'Iniciatives (en el que participa la Generalitat) y el consorcio Turismo de Barcelona (participado a partes iguales por el ayuntamiento de la capital catalana y la Cámara de Comercio de Barcelona y presidido por el hotelero Joan Gaspart). Ambas partes controlarían el 25% de la aerolínea con sede en Palma de Mallorca aunque buscarán nuevos accionistas catalanes para tomar hasta el 80% del capital.
En un comunicado, el grupo escandinavo detalló que 'el proyecto de estructura de la transacción seguirá siendo un núcleo accionista de Spanair, que actuará como su socio industrial para ayudar en la aplicación del Plan Estratégico'. Con este principio de acuerdo, SAS pretende 'fortalecer la posición de Spanair en España y su posición como líder en Barcelona'. Las partes han acordado no hacer comentarios sobre los posibles términos y condiciones de dicha operación hasta que el acuerdo finalice. Ambas partes han dado como fecha límite para alcanzar un pacto el 31 de enero. El desembarco de capital público privado en la aerolínea permitiría a la Generalitat colmar una vieja pretensión, la de dar con un comprador catalán para la filial de SAS. En los últimos meses, el gobierno catalán ha auspiciado un comprador para aerolínea, aunque fracasó en su intento de que la aerolínea de vuelos chárter Gadair y el fondo portugués Longstock se hicieran con la aerolínea.
El ejecutivo de José Montilla también hizo suyos los planes de la aerolínea en El Prat, después de que Iberia optara en 2006 por cancelar el grueso de sus rutas desde el aeropuerto y ceder conexiones a Clickair.
Fuentes cercanas a la operación señalaron que Catalana d'Iniciatives está elaborando actualmente 'los estudios preliminares' para ver cómo se canalizaría la oferta, y añadieron que 'en cualquier caso, la operación está en un estadio embrionario'. La entidad de capital riesgo cuenta con unos fondos propios de 67 millones y participa en nueve empresas, por lo que la adquisición del 25% del capital de Spanair con Turismo de Barcelona necesitaría de una inyección de capital 'relevante'. Al no tratarse de un fondo y ser una sociedad anónima, podría realizar una ampliación de capital, con la entrada de nuevos socios o la aportación de los actuales. El 73% del capital de Catalana d'Iniciatives está formado por 22 entidades privadas, entre empresas (Agbar, Gas Natural, Telefónica o Repsol y entidades financieras (La Caixa, Caixa Catalunya o Banco Sabadell, que podría financiar parte de la operación, aunque un portavoz de esta entidad declinó hacer comentarios).
El resto del capital de Catalana d'Iniciatives se reparte por igual entre la Generalitat catalana y del Ayuntamiento de Barcelona. La entrada de nuevos accionistas en Spanair, que se produce después de que SAS renunciara a su venta y tras ejecutar una reestructuración.
Vueling y Clickair, escépticos
Las dos principales compañías de bajos costes españolas, Vueling y Clickair, que ahora están en proceso de fusión, recibieron ayer con una cierta incredulidad y escepticismo el anuncio de las conversaciones de SAS con un grupo de entidades municipales y empresariales catalanas para venderles una participación mayoritaria en la compañía aérea española Spanair.Las dos compañías ven como se deteriora uno de los argumentos, ser empresas catalanas, que han estado explotando cada una por separado desde que comenzaron sus respectivas operaciones. Ahora Spanair quiere también disputar este espacio y para ello cuenta con la baza que le da el ser uno de los principales adjudicatarios de espacio en las nuevas instalaciones aeroportuarias de la nueva Terminal Sur, ahora llamada T-1, del aeropuerto de El Prat.La principal preocupación de Vueling y de Clickair, no obstante, es el retraso del dictamen de competencia para su fusión anunciado por Bruselas.