Los recortes de tipos no frenan la fuerte caída de las Bolsas
El recelo volvió ayer a las Bolsas europeas, incluido un Ibex que perdió más de un 6%. La reducción de los tipos de interés en la zona euro, 50 puntos básicos, ya estaba descontada y no sirvió de acicate a los inversores, que tampoco valoraron el histórico recorte de 150 puntos del Banco de Inglaterra. El mercado mira de nuevo hacia los datos macroeconómicos y a los resultados empresariales.
El proverbio indica que en los mercados cotizan más los rumores y expectativas que las noticias. Y ayer fue así de nuevo. Las Bolsas europeas, que habían descontado en jornadas anteriores la reducción de los tipos de interés en al menos 50 puntos básicos hasta 3,25% por parte del Banco Central Europeo (BCE), bajaron ayer con recobradas fuerzas. Los inversores optaron en general por recoger beneficios a la espera de nuevos estímulos y ante una situación económica muy comprometida.
El Ibex, a diferencia del miércoles, no se apartó de la trayectoria general y cayó ayer un 6,27%. Con este desplome, el índice pierde el referente de los 9.500 puntos y recorta hasta el 15% la recuperación lograda en jornadas anteriores desde al mínimo anual alcanzado de 7.905 puntos del 25 de octubre. El índice selectivo descendió con poco volumen de negociación, 3.376 millones, cuando la media anual es superior a los 5.000 millones. Nueva York se sumó desde la apertura al descalabro, tras las fuertes pérdidas de la sesión precedente. Al cierre, el Dow Jones se dejó un 4,85%; el S&P 500, un 5,03% y el Nasdaq, un 4,34%.
El derrumbe del Ibex castigó a compañías de diferentes perfiles sin apenas discriminar por sectores. Entre las que más sufrieron estuvieron constructoras -OHL, Ferrovial y FCC- o energías renovables -Gamesa y Acciona-. Nadie cerró en positivo. Los bancos, además, se vieron impactados por un informe de Credit Suisse que redujo los precios objetivos de las entidades bancarias españolas. El banco helvético, que baja además la previsión de resultados, fija ahora un precio objetivo a Santander de 14 euros frente a los 16 previos, mientras que a BBVA se lo deja en 17 euros -el anterior ascendía a 19 euros-.
Si la decisión del BCE no se salió del guión previsto, tampoco el discurso de su presidente, Jean-Claude Trichet, deparó grandes sorpresas. Los mensajes que lanzó al mercado fueron básicamente dos: no está descartada una próxima rebaja adicional de los tipos -posiblemente en diciembre- y la economía real se está viendo muy afectada por las turbulencias financieras.
No se quedó el mercado satisfecho con la noticia, sobre todo después de que el inesperado y decidido recorte de tipos del Banco de Inglaterra, 150 puntos básicos hasta el 3%. En el tiempo que separó el anuncio del BCE del previo del Banco de Inglaterra, el Ibex mejoró su evolución, que era claramente bajista desde el comienzo de la sesión, y llegó a limitar la caída hasta el 2%, quizá esperando un movimiento similar en el BCE que no se produjo.
En este contexto, aunque su marco de actuación es más restringido, el Banco de Inglaterra arrebató el papel protagonista de la jornada al BCE. Para Jordi Padilla, gestor de Banco Popular Banca Privada, la apuesta de la entidad británica -que califica de agresiva- muestra que la inflación en ese área está controlada ante 2009, pero que los problemas de la economía son relevantes. Respecto a la decisión del BCE, señala que las medidas de esta entidad son más globales y no están enfocadas a las circunstancias de uno o dos países.
Después de que los efectos del resultado de las elecciones estadounidenses y de la bajada de los tipos de interés se hayan consumido, como ayer se comprobó, la cuestión que ahora se plantean los analistas es si existen factores que puedan fijar un rumbo medianamente positivo a las Bolsas.
Para Javier Mata, director de análisis de Nmás1, los Gobiernos tienen aún otras herramientas en sus manos que pueden ser incluso más eficaces en etapas de bajo crecimiento económico y casi en la frontera de la deflación. Ayer, de hecho, el FMI agravó el temor a la recesión al recortar con fuerza su previsión de crecimiento mundial. Y el dato de empleo que se publica hoy en Estados Unidos se prevé negativo. Con todo, Mata estima que los inversores mirarán, además de los nuevos datos macroeconómicos, los resultados empresariales que tampoco están dando alegrías.
También Pablo García, director de Oddo en España, afirma que los mercados tenían dos cartuchos -Obama y la bajada de tipos- que ya ha gastado, por lo que ahora hay que mantenerse cauteloso con la renta variable. Padilla añade que la tendencia bajista no ha concluido, pero que es lógico que, en el actual panorama de desconfianza, los inversores opten por recoger beneficios. Pero estima que noviembre y diciembre pueden ser mejores que octubre, no descartando nuevos rebotes.
El euro se deprecia frente al dólar
El euro bajó ayer frente a casi todas las principales monedas del mundo después de que el Banco Central Europeo (BCE) recortase su tasa de interés. Frente a la divisa estadounidense la devaluación superó el 1,7% hasta quedarse en 1,27 dólares. También perdió valor ante el yen japonés, el franco suizo y la libra esterlina. Por el contrario, la divisa británica mantuvo en general un comportamiento positivo, aunque descendió ante el dólar. Si bien los recortes de tasas normalmente reducen el atractivo de una moneda, la libra se ubicó en territorio positivo contra el euro porque los inversores apuestan a que el alivio monetario ayudará a estimular la economía. 'En un ambiente de crecimiento normal los diferenciales de tasas importan, pero dada la situación actual, los recortes de tipos son vistos como positivos', manifestó a Reuters Boris Schlossberg, director de análisis monetario de GFT Forex. 'Lo que se valora ahora más es si su impacto estimula la economía', añadió.También el petróleo siguió la senda emprendida en la jornada anterior. Llegó a derrumbarse más de un 6% hasta los 57 dólares el barril, perdiendo así la cota de los 60 dólares. Pese a estos fuertes retrocesos, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) estima que el precio promedio del barril de petróleo se situará por encima de los 100 dólares entre 2008 y 2015 y podría llegar a alcanzar los 200 dólares en 2030 en términos nominales, ante los mayores costes de la producción. El citado organismo recuerda que esas cifras representan un 'ajuste importante' respecto a las previsiones que realizó hace un año. La jornada fue negativa para la cotización de otras materias primas industriales, como el cobre, el níquel y el estaño e, igualmente, para los metales preciosos.
Atentos a...
La cifra de personas que en Estados Unidos perciben el subsidio por desempleo ha alcanzado el nivel más alto en 25 años, informó ayer el Departamento de Trabajo. Otro documento del gobierno muestra que entre julio y septiembre las empresas recortaron las horas de trabajo de los empleados al ritmo más alto de seis años.