Cataluña acabará con las trabas a la gran distribución
El Ejecutivo de Montilla dejará de frenar las nuevas aperturas gracias a la directiva de servicios europea.
Cataluña quiere dejar de ser una de las comunidades autónomas más restrictivas a la hora de legislar sobre comercio. El presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, aprovechó la inauguración del congreso de la alimentación y el gran consumo, Aecoc, para desvelar que planea una nueva normativa más beneficiosa para los grandes grupos de distribución.
El Gobierno autonómico aprovechará la adaptación en España de la Directiva de Servicios de la Unión Europea para crear 'un marco legal más abierto y efectivo, con menos trabas burocráticas'. De esta manera, el nuevo texto será 'más ágil', a favor de 'un interés general que contribuya a crear una cohesión social y a generar riqueza y empleo'.
'Que la coyuntura no condicione sus proyectos de futuro', destacaba Montilla durante su intervención ante más de 1.000 empresarios y directivos. 'Tenemos que facilitar que un sector como el suyo encuentre las localizaciones óptimas para invertir', recalcaba. Actualmente, la moratoria de apertura de nuevos hipermercados en Cataluña data de hace 11 años, según señalan desde el sector. 'Ustedes tienen que ser pioneros en innovación, abriendo nuevos mercados, también en Cataluña'.
Montilla responde así a las exigencias que en los últimos años realizaba la gran distribución y rompe la estrategia del anterior Gobierno de CíU, que se centraba en la protección del pequeño comercio.
Pero además, las palabras del presidente catalán siguen la estela de las propuestas del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, que ya asumía que la transposición de la directiva comunitaria iba a impulsar el comercio ante la actual coyuntura económica. De hecho, el responsable de la cartera de Comercio, Miguel Sebastián, ya señalaba hace unas semanas que la nueva Ley de Comercio Interior (cuyo borrador puede estar ultimado en sólo dos semanas) eliminará la obligatoriedad de una segunda licencia de apertura. Sin embargo, el Gobierno quiere evitar que la eliminación de restricciones pueda convertirse en barra libre para las grandes superficies, por lo que seguirá manteniendo criterios, por ejemplo medioambientales o urbanísticos, para regular las nuevas aperturas.
Las palabras de José Montilla provocaron la reacción inmediata del sector. De hecho, todas las patronales de la distribución aplaudieron la decisión de eliminar escollos a la hora de realizar nuevas aperturas. 'Estamos esperanzados', aseguraba Javier Millán Astray, director general de Anged, la asociación de la gran distribución que agrupa a compañías como El Corte Inglés, Carrefour, Alcampo o Fnac. 'Es una medida lógica porque tienen que adaptar la legislación comunitaria', apuntaba. 'Pero tenemos que ver en qué medidas se concreta finalmente'.
El máximo responsable de Anged no enumera el número de proyectos que están paralizados actualmente a la espera de la nueva legislación. 'No podemos saber cuántos proyectos no se han puesto en marcha porque ni siquiera se nos deja presentarlos', criticaba. Por su parte, el director general de la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (Asedas), Ignacio García Magarzo, valoró positivamente la intervención del presidente de la Generalitat, ya que permitirá reducir los costes de implantación de las compañías. 'Habrá una legislación mínima, para cumplir los objetivos que marca Bruselas', explicaba, 'y permitirá que a las empresas les cueste menos cumplir las normas'. 'En mi opinión, la decisión de la Generalitat va en la línea correcta', afirmaba García Magarzo.
En su opinión, la liberación del sector no beneficia sólo a la gran distribución, sino también a las cadenas de supermercados de menor dimensión. 'Es buena para todo el sector porque va a beneficiar a todos los formatos', aclaraba. La otra patronal del sector de los súper, Aces (que agrupa a las grandes cadenas que también tienen redes de menor superficie, como Carrefour o Eroski), destacaba sobre todo cómo hasta ahora la normativa catalana ya iba en contra de la legislación comunitaria previa a la nueva directiva. 'La Administración catalana, como todas tiene que adaptarse a la nueva realidad y las palabras de Montilla, en mi opinión, son positivas', destacaba Aurelio del Pino, director general de Aces.
Europa considera que la legislación de comercio española (que data de 1996) no cumple la normativa comunitaria, al exigir una segunda licencia de carácter regional y limitar además las aperturas en función de su localización. Una disputa que actualmente está en manos de los tribunales comunitarios, a la espera de que la nueva Ley de Comercio elimine las trabas, tal y como exige el Ejecutivo de la UE. José Montilla no obvió durante la apertura del congreso la crisis financiera y de consumo. 'Es complicada, pero nuestras empresas son fuertes', señaló.
Además, asumió que la respuesta a la situación actual 'no puede ser como en crisis anteriores porque ahora no podemos fijar tipos de cambio ni devaluar la moneda, pero sí elevar la inversión pública'. En su opinión, las administraciones tienen que promover 'un nuevo modelo de crecimiento' y explicó que este modelo se ha traducido en Cataluña en unos presupuestos 'austeros' que mantendrán las inversiones aunque incurrirán en déficit.