McCain niega haber tenido una relación con la representante de un lobby
El fantasma del caso Lewinsky asomó ayer la cabeza en la campaña de primarias de EE UU. Esta vez, el señalado es el candidato republicano John McCain.
A primera hora de la mañana, el senador convocó una rueda de prensa a la que se presentó con su esposa, Cindy McCain, para negar un artículo publicado en The New York Times que sugiere que en el año 2000, mientras disputaba las primarias a George W. Bush, tuvo una relación romántica con una lobista, Vicki Iseman. El periódico también deja caer que ha hecho favores a grupos de intereses representados por ella pero no afirma categóricamente ninguno de los dos extremos ni da por buena que hubiera una relación sentimental aunque si una apariencia de ella.
Tanto el senador como su esposa dijeron estar muy decepcionados con el periódico y le acusaron de mantener una campaña sucia contra su candidatura. McCain, un veterano de guerra que ha sido reelegido cuatro veces para representar Arizona en el Senado, dijo que ha servido "a la nación honorablemente durante más de medio siglo" y que en ningún momento he hecho nada que pueda traicionar la confianza pública". The New York Times apoyó en un editorial la candidatura de McCain entre los republicanos .
El senador, que ha cimentado una imagen pública de luchador contra los lobbies y las presiones de grupos de empresas e intereses, dijo que Iseman, 30 años más jóven que él, era y sigue siendo una amiga.
Pero el artículo del rotativo de Nueva York, cita a antiguos colaboradores de McCain (sin dar su nombre) que afirman que Iseman estaba demasiado cerca del senador, ya que acudían juntos a fiestas de captación de fondos, le visitaba en su oficina y viajaban en el jet privado de uno de sus clientes. "Convencidos de que la relación se había convertido en romántica", explica el diario, "algunos de los consejeros intervinieron para proteger al candidato de sí mismo". El staff del candidato a la nominación hace ocho años empezó a bloquear el acceso de Iseman a McCain y hubo confrontaciones con ambos por este motivo.
Los dos negaron entonces, como lo negaron ayer, que hubiera una relación romántica pero entonces, el personal de campaña temía que incluso la apariencia de una amistad tan fuerte con una lobista hiciera peligrar la imagen de McCain.
El periódico se hace eco de un conflicto en 1991 con Charles Keating, uno de los empresarios más cercanos al senador y de cómo trató de influir entre los reguladores bancarios a su favor. Keating fue acusado de fraude durante la crisis de los Savings and Loans. El senado concluyó en aquel momento que McCain había tenido poco juicio al alinearse con Keating pero que sus acciones no eran "impropias". Desde entonces McCain ha tratado de reformar las leyes de financiación de campañas y de los lobbies aunque según el diario en el pasado aceptó por ejemplo volar en el jet de Rupet Murdoch o Michael Bloomberg.
Mike Huckabee, contendiente en las primarias por el mismo partido delcaró que "McCain es un hombre decente y honorable" y daba por buena su respuesta al artículo de The New York Times en la rueda de prensa.