El consejo de administración de Altadis ya manifestó que considera atractiva la oferta de Imperial Tobacco y que la aceptará, a falta de otra superior, una vez que el organismo supervisor de los mercados apruebe el folleto de la propuesta de compra.
La Comisión Europea, por su parte, dispone hasta el próximo 4 de octubre para analizar los posibles problemas de competencia que podrían derivarse de la operación, mientras que las autoridades estadounidenses ya han dado su visto bueno.
Una vez transcurrido este plazo, Bruselas puede dar 'luz verde' a la OPA sin condiciones o lanzar una investigación en profundidad si cree que puede tener un impacto negativo sobre la competencia. En este último caso, las empresas pueden ofrecer desinversiones en aquellos sectores en que sus actividades se solapan.
Imperial ha subrayado en reiteradas ocasiones el gran encaje estratégico de la operación que, de prosperar, daría lugar a la cuarta mayor tabaquera del mundo, con una amplia y diversificada cartera de marcas y productos que permitiría reforzar su posición tanto en mercados europeos como emergentes.