Las inmobiliarias duplicarán sus ingresos en el extranjero
Ante el enfriamiento del sector residencial en España, las inmobiliarias amplían sus horizontes y miran al extranjero. Los ingresos en el exterior superaron los 3.000 millones de euros en 2006 y se duplicarán en 2007, según un informe de la consultora DBK.
La gran liquidez de la que disponen y las atractivas oportunidades existentes en los mercados foráneos hicieron que un centenar de inmobiliarias españolas optaran por invertir fuera de España entre 2004 y 2006. En total, unas 125 empresas del sector operan actualmente fuera del país, según el informe 'Internacionalización en el sector inmobiliario' hecho público ayer por la firma de análisis sectorial DBK.
El crecimiento de las inmobiliarias españolas en el extranjero ha sido fulgurante. La facturación pasó de los 70 millones de euros que sumaba el negocio en 2002 a alcanzar los 3.050 millones en 2006, lo que supone un incremento superior al 150% anual. La actividades en el extranjero de las compañías españolas se concentran en los pesos pesados del sector: las dos primeras empresas acaparan el 53,5% de los ingresos foráneos, mientras que las cinco primeras suman un 75,9% del volumen de negocios total.
Las previsiones de DBK para 2007 auguran que la actividad podría alcanzar los 6.200 millones de euros y llegar incluso a los 9.500 millones de euros en 2008. La coyuntura del sector inmobiliario español, en aparente declive, hace pensar que las empresas seguirán comprando en el extranjero para seguir manteniendo el actual ritmo de crecimiento.
Unas 125 promotoras españolas operan ya en el extranjero
Lejos quedan los años en los que las inmobiliarias españolas sólo compraban en Portugal, aunque Europa Occidental y sus grandes ciudades siguen siendo las zonas privilegiadas para invertir. De las 39 empresas analizadas por el informe, 26 tenían negocios en la parte oeste del Viejo Continente. Europa del Este (20), Latinoamérica (16), el norte de África (5) y Norteamérica (3) son las demás zonas de mayor implantación.
Estos movimientos se deben en parte a que las españolas han adquirido compañías de gran dimensión, como la francesa Société Foncière Lyonnaise, comprada por Colonial, o la también gala SIIC de París adquirida por Realia. Además, varias promociones iniciadas en el periodo 2003-2005 ya generan ingresos.
Un 90% de la facturación exterior se generó en Europa Occidental, dado que todavía le falta madurez a las inversiones en otras zonas. Del 10% restante destacan Marruecos, que absorbió el 3% de la facturación total, Europa Central y del Este (2,8%) y América (2,5%).
'Comprar edificios muy bien situados y con clientes de primer nivel, es nuestra estrategia', explica un portavoz de Testa, filial patrimonialista del grupo Sacyr Vallehermoso. Esta inmobiliaria dispone de un edificio de oficinas en París, la Tour Adriá, comprado en 2002 por 600 millones de euros, y dos en Miami. Uno de ellos aloja al Santander.
Las grandes urbes, las más deseadas
Los edificios bien situados en grandes ciudades como París y Londres siguen siendo los caramelos más deseados y también los más difíciles de encontrar. Compras como la de Metrovacesa, que adquirió este año la sede del HSBC en Londres por 1.600 millones de euros para después alquilárselo al mismo banco, son oportunidades cada vez más escasas.'Es difícil dar con inmuebles muy atractivos en París o en Barcelona', explica una fuente de la inmobiliaria Colonial. Por eso mismo, la empresa que preside Luis Portillo apuesta por diversificar geográficamente a través del negocio de los centros comerciales en Bulgaria y Rumanía. Colonial, al lanzar una opa sobre Riofisa, también se está diversificando con este tipo de promociones en esos mercados.Europa del Este también aparece en los planes de Realia, que dispone de 250.000 metros cuadrados en Polonia y no descarta incursiones en Rumanía.