Un asesor de la CE trabaja para eléctricas alemanas
El comisario europeo de Energía ha contado desde 2005 con un asesor personal que se sienta en el consejo de administración de dos eléctricas alemanas (Vatenfall y EnBW). El caso ha obligado a la CE a revisar los posibles conflictos de interés de todos sus consejeros.
Se llama Rolf Linkohr, es alemán y si algo no se le puede reprochar es su profundo conocimiento de la política energética europea. A todos los niveles. En los pasillos comunitarios y en las mesas de los consejos de administración.
Esa doble vida acaba de costarle el puesto de 'consejero especial' del comisario europeo de Energía, Andris Piebalgs, después de que una organización no gubernamental (Corporate Europe Observatory) revelase que Linkohr dirige una consultora especializada en temas energéticos.
Bruselas ha rescindido su contrato porque este antiguo eurodiputado socialista ha rehusado firmar una declaración sobre la inexistencia de conflictos de interés entre sus dos labores. La CE, además, ha tenido que revisar la situación de los 55 asesores externos cuyos servicios utiliza en estos momentos.
Pero el caso Linkhor arroja, sobre todo, una inquietante sombra de duda sobre la independencia de la Comisión Europea en un periodo tan convulso para los mercados energéticos como el actual. El alemán ha tenido acceso directo al comisario de Energía desde 2005, cuando se desencadenaron operaciones en el sector tan importantes como las opas de Gas Natural y Endesa por Eon o la fusión de Gaz de France y Suez.
El departamento de Piebalgs asegura que su labor se ha limitado 'a asesorar al comisario en temas como el cambio climático', con vistas a la publicación del Libro Verde de la Energía.
Pero los potenciales conocimientos de Linkohr llegan mucho más lejos que ese interés medioambiental, como revela su trayectoria política y profesional. Porque Linkohr no sólo preside la consultora en cuestión sino que además es miembro del consejo consultivo de la eléctrica EnBW y del consejo asesor de Vatenfall.
Esta última es el socio de Eon (junto a Basf) en la construcción del polémico gasoducto del Báltico. Este mismo mes, el presidente del consorcio, el ex canciller y compañero de partido de Linkohr, Gerhard Schröder, visitó a Piebalgs, entre otras autoridades comunitarias, para recabar el apoyo comunitario al proyecto.
La sombra de Linkhor también añade otro contorno a algunas de las declaraciones de Piebalgas durante los últimos meses. El comisario pidió explicaciones a España sobre la opa de Gas Natural por Endesa, aunque Bruselas no tenía competencia. Y preguntado sobre el mercado energético español sentenció: 'sería más rápido decir lo que está bien que lo que está mal'. Al menos, ahora se sabe que estaba muy bien asesorado cuando emitió ese juicio.
600 euros al día por dar una opinión
Rolf Linkohr es uno de los 55 asesores que ayudan a la Comisión Europea a diseñar sus políticas. No están en nómina, pero cobran a razón de 600 euros por cada día que se les consulta. 'Tienen otros trabajos y si no se les remunera no asesorarían a la CE', justifica el estipendio un portavoz comunitario. El comisario de Energía contaba, hasta el cese de Linkohr, con tres consejeros áulicos. 'Es normal', dice la CE, 'porque no tenía experiencia en la materia'.