EMI abandona la idea de comprar Warner
El grupo musical EMI, que cuenta con figuras como Robbie Williams y el grupo Coldplay, ha asegurado hoy que ha abandonado sus planes de comprar Warner Music Group por 2.500 millones de dólares. En los últimos años, estas dos compañías se han lanzado mutuas ofertas de adquisición, que han sido rechazadas. La unión de EMI y Warner Music controlaría alrededor del 25% del mercado de música grabada, por delante de BMG y situándose en segundo lugar tras Universal.
La decisión se conoce después de las dudas surgidas sobre si los reguladores europeos autorizarían una mayor consolidación de la industria musical, según los expertos.
En concreto, el Tribunal de Primera Instancia de la Unión Europea (UE) anuló hace unos días la autorización al proyecto de fusión de los sellos discográficos Sony y BMG. Ante esta situación, el consejo de EMI ha decidido no buscar "de momento" una aproximación con Warner Music, pero revisará su posición a la luz de lo que pueda pasar, ha indicado el grupo británico.
"EMI aún tiene confianza en que la industria global de la música tiene excelentes perspectivas a largo plazo debido a la rápida demanda de expansión por música digital", ha asegurado EMI en una nota. EMI y Warner Music siempre fueron vistos como posibles socios, que uniría las estrellas del grupo británico con las del estadounidense, que cuenta con cantantes como Madonna y James Blunt. EMI siempre había indicado que una adquisición de Warner Music sería atractiva para los dos grupos de accionistas. Desde el pasado mayo, EMI hizo dos ofertas para adquirir Warner, pero fueron rechazadas.
Un continuo tira y afloja
En los últimos años, estas dos compañías han estado sumidas en un tira y afloja con mutuas ofertas de adquisición. El 3 de mayo, EMI hizo una oferta por Warner Music, pero fue rechazada. Al mes siguiente, Warner hizo una oferta alternativa por EMI de nuevo contestada el 23 de junio por EMI, y ambas rechazadas. Hace sólo unas semanas, EMI rechazó una nueva oferta de compra de Warner por 3.675 millones de euros.
Una eventual unión de las dos compañías controlaría alrededor del 25% del mercado de música grabada, por delante de BMG y situándose en segundo lugar tras Universal, según la Federación Internacional de la Industria Fonográfica.