Delphi seguirá operando gracias a un préstamo de 1.660 millones
El funcionamiento diario de Delphi, el principal fabricante de componentes para la automoción, está garantizado gracias a un préstamo de 2.000 millones de dólares, 1.660 millones de euros, concedido por los bancos JP Morgan y Citigroup. Así lo aseguró ayer Delphi en un comunicado emitido después de la primera comparecencia de los responsables de la compañía ante el tribunal que supervisa la suspensión de pagos, presentada el pasado sábado.
El juez autorizó ayer el uso de los primeros 950 millones de dólares, que se usarán para 'gastos operativos, incluyendo obligaciones con proveedores y salarios y pensiones' de los empleados del grupo.
'La liquidez total disponible en Delphi (incluyendo más de 1.000 millones de dólares de las filiales fuera de Estados Unidos', que Delphi asegura no va a repatriar, 'mantendrán las operaciones globales y ayudarán a asegurar la continua adaptación del trabajo de las unidades de negocio'.
El presidente de la corporación, Steve Miller, aseguró ayer además que no va a solicitar a General Motors un alza de los precios que le cobra. La multinacional supone aproximadamente el 50% de las ventas totales de Delphi. 'Lo único que le pido a GM es que nos mantenga en su mix de producto y que nos siga permitiendo entrar en los concursos para nuevos modelos', declaró ayer Miller.
Delphi y 38 de sus filiales en EE UU elevaron el pasado sábado peticiones voluntarias de reorganización de actividades bajo el capítulo 11 del código de bancarrotas . Este procedimiento se entiende no como una suspensión de pagos propiamente dicha, sino como un proceso de reconversión de la empresa, según fuentes en España.