Los trabajadores responden al plan de GM con una huelga salvaje en Alemania
La plantilla de General Motors en Alemania no va a ponerle las cosas fáciles a la empresa. Los 9.600 empleados de la planta alemana de Bochum han paralizado la producción en la mayor planta en Alemania. La iniciativa, aseguran los sindicatos, ha sido lo que se conoce como huelga salvaje, es decir, un paro en que no ha sido convocado por las centrales sindicales o en el que no ha habido un preaviso.
æpermil;sta ha sido la primera respuesta de los empleados del grupo estadounidense a la decisión de despedir a 12.000 personas en todo el mundo -unas 10.000 de ellas en Alemania, 300 en Amberes y otras 600 en la planta zaragozana de Figueruelas-. El grupo espera lograr un ahorro de 500 millones anuales con la medida, encaminada a remontar las pérdidas que han asolado las cuentas de la filial española desde 1999 y que teñirán de rojo los resultados este año.
'Nadie les ha animado a dejar de trabajar', aseguró el delegado del sindicato IG Metall en la planta. Lo cierto es que las cadenas de montaje se detuvieron el jueves a las 15 horas y los representantes sindicales recalcaron ignorar cuándo se reanudarían. La planta de Bochum produjo 218.300 Opel Zafira y 67.500 modelos Astra en 2003. GM, según los sindicatos, quiere eliminar 4.000 empleos en la factoría. Un portavoz de General Motors Europe aseguró ayer que le parece 'desafortunado' que 'los empleados y sus líderes sientan la necesidad de ir a la huelga', y aseguró que no creen que 'este tipo de acciones ayuden a mejorar la situación', si bien aseguró que 'la empresa respeta sus derechos'.
Lo cierto es que esta medida sí contribuyó a enrarecer ejerció una presión más sobre la directiva de la compañía, que el viernes se sentó por primera vez con los sindicatos para negociar los despidos. A su término, ni el presidente de General Motors en Europa, Fritz Henderson, ni los representantes sindicales quisieron detallar la distribución de los despidos, ya que, argumentaron, ésta será la parte principal de las negociaciones entre dirección y plantilla. En el mismo sentido se manifestó una portavoz de la empresa en España. El secretario general del sindicato UGT en General Motors España, Fernando Bolea, presente en la reunión entre sindicato y dirección, subrayó el talante de la empresa tras declarar que está dispuesta a 'mejorar los resultados empresariales sin recurrir necesariamente a despidos ni al cierre de fábricas'.
El consejero delegado de GM Europa, Carl-Peter Foster, aseguró después de la reunión de urgencia del comité de supervisión el viernes que espera alcanzar 'en pocas semanas' un acuerdo satisfactorio para las partes. Foster añadió que la cifra de 10.000 empleos menos que se maneja para las plantas de Alemania 'no es ningún dogma'.
Las críticas por los despidos no se limitaron a los trabajadores. Los políticos han culpado a la central de General Motors en Detroit de haber aplicado una estrategia miope y a corto plazo en Europa, carente de sentido de la realidad en lo que respecta la gama de modelos. Así lo dijo el viernes nada menos que el presidente de la República, Horst Köhler, según el cual General Motors ha sido 'negligente' en el mantenimiento de la competitividad de sus plantas europeas. El ministro de Economía, Wolfgang Clement pidió calma a los trabajadores y aseguró que hacen falta más reformas en el país.
La prensa alemana cargó ayer contra unos y otros. El más severo fue el Frankfurter Runsdschau, quien aseguró que los políticos son responsables de las omisiones de Opel, pero que la dirección de la marca cometió errores de bulto al descuidar la calidad. El rotativo fue más lejos al afirmar que estas 'desgracias también tiene un nombre: José Ignacio López de Arriortúa'. El directivo vasco trabajó en GM entre 1992 y 1993.
Atentos a
Opel espera que las negociaciones con los sindicatos concluyan 'en pocas semanas'.GM ha vendido el 0,1% menos hasta septiembre en Europa. El jueves anunció que las pérdidas en el continente totalizaron 192 millones en el tercer trimestre.
'Miles de millones' para 45 nuevos modelos
Los portavoces de General Motors en Europa y España se esforzaron el viernes por mostrar una imagen de normalidad pese a los 12.000 despidos anunciados. En un anuncio publicado en los principales diarios alemanes y firmada por el presidente de General Motors Europe, Fritz Henderson, la compañía anunció que invertirá 'miles de millones de euros' en el lanzamiento de 45 nuevos modelos en Europa durante los próximos cinco años.Henderson afirmó que los ingenieros del centro de Rüsselsheim trabajan en productos de 'la más alta calidad en Alemania y en el resto de Europa'.Un portavoz de la compañía en España aseguró que los productos de Opel están mejorando sus ratios de calidad, y que ratificó su convencimiento de que la renovada gama de coches permitirá un repunte de las ventas que aliviará la situación.En lo que va de año, el grupo General Motors ha vendido 1,083 millones de coches en Europa occidental, lo que supone una caída del 0,1%. La principal marca, Opel/Vauxhall ha sido la causante de esta caída, tras colocar 1,02 millones de coches en el mercado, el 0,3% menos.En España, el grupo automovilístico ha vendido en los nueve primeros meses del ejercicio 108.949 coches, lo que supone un alza del 3,1%. Opel, que supone más del 97% de las ventas en el país, ha experimentado un repunte del 2,2%.