Cementerio monumental
Los cementerios ya no son lo que eran. Los grandes panteones y las tumbas escultóricas han dado paso a nichos más impersonales. A sabiendas de su patrimonio cultural y artístico, los gerentes del camposanto barcelonés de Poblenou han establecido la ruta de los cementerios. Según Eduardo Vidal, director general del cementerio, se reseñan una treintena de monumentos.
Para tal fin han editado un tríptico informativo gratuito con los datos básicos de la ruta y han instalado diversos puntos de información a lo largo del recorrido. Y para aquellos que quieran ir un poco más lejos, han realizado una guía, Barcelona a través de sus cementerios. Un paseo por el Cementerio de Poblenou escrita por Elisa Martí, profesora de literatura urbana de la Universidad de Chicago. La guía cuesta 15 euros.
La visita no sólo pretende acercar el visitante a los monumentos, también se explica la evolución de la historia de Barcelona durante el siglo XIX. Poblenou fue fundado en 1775 aunque fue destruido por las tropas napoleónicas en 1813. En 1819 fue reconstruido por el arquitecto italiano Antonio Ginesi.
Buena parte de la guía se dedica a contar el espíritu innovador de Barcelona de aquellos años con el impulso tecnológico y científico que se vivió durante el XIX y que dejó huella en el cementerio. Como también se refleja la bonanza económica de finales del XIX que quedó plasmada en numerosos panteones de las familias de la alta burguesía. En su vertiente más artística, Poblenou es en sí un monumento neoclásico. En los panteones se aprecia la influencia de notables artistas de la época, como Antonio Canova o de escultores italianos como los hermanos Baratta, Casoni o Fabiani. Pero no sólo los hay neoclásicos. Otros panteones imitan los estilos medievales o incluso los hay modernistas y románticos. De 1850 a 1960 el principal material que se utilizó fue el mármol italiano en detrimento del español. Destaca entre tanto panteón dos monumentos, el dedicado a los fallecidos por la fiebre amarilla de 1821 y la cruz celta.
Para visitar el cementerio, que es gratuita, hay que contactar en el teléfono 93 484 17 10 para concertar una cita.
Rehabilitar y conservar los más singulares
La Asociación Europea de Cementerios Monumentales se constituyó en noviembre de 2001 en la ciudad italiana de Bolonia con el objetivo de promover la rehabilitación de camposantos singulares, difundir su conocimiento, promover su estudio y facilitar su incorporación a los circuitos culturales y turísticos.En un primer momento se adhirieron cementerios de 11 municipios europeos entre ellos los de Bolonia, Milán y Génova. París está a punto de entrar. De España, además del barcelonés, está el de Granada.Según Eduardo Vidal, el único de los monumentales que ha realizado una guía y una ruta tan detallada ha sido el de Poblenou. La ruta surge como imitación a la ruta del modernismo organizado por el Ayuntamiento de Barcelona para mostrar los edificios singulares de este estilo. El cementerio se financia principalmente con las tasas que abonan los propietarios de los nichos y de los panteones.