Las empresas van mejor que su acción en Bolsa
No dejes que los árboles te impidan ver el bosque'. La advertencia que contiene este aforismo sirve en parte para ejemplificar lo que ocurre con la marcha de la renta variable en los últimos meses.
No dejes que los árboles te impidan ver el bosque'. La advertencia que contiene este aforismo sirve en parte para ejemplificar lo que ocurre con la marcha de la renta variable en los últimos meses. Los árboles -incremento del precio del crudo, tensión geopolítica y un más que probable cambio en la política monetaria- han impedido que los inversores hayan valorado en su justa medida las bellas imágenes que ofrece el bosque -tirón de los beneficios, atractivas valoraciones-.
Los expertos esperan que las empresas del Ibex 35 batan este año su récord de beneficios con un total de 23.700 millones de euros, un 12,8% más que en 2003. En Europa los datos agregados del primer trimestre arrojan un incremento de los beneficios del 25%, frente al 18% previsto antes de la campaña de resultados.
En EE UU, las ganancias conjuntas de las 495 compañías del índice Standard & Poor's 500 (S&P 500) que han presentado sus resultados del primer trimestre suben un 23,37% con respecto a las obtenidas en el mismo periodo del año anterior, según datos de Bloomberg. Y, lo que es más significativo, el 72,3% de las cuentas han deparado sorpresas positivas en relación a lo previsto por los analistas, el 13,4% estuvo en línea y sólo el 14,4% por debajo de las estimaciones.
Los analistas apuestan por los valores más cíclicos para cuando se despejen las dudas
A pesar de estas buenas cuentas y perspectivas, la evolución de las Bolsas no ha seguido el mismo camino, con pequeñas ganancias anuales en algunos casos (el Ibex 35 sube un 4,2%, el Dax alemán un 1,25% y el Euro Stoxx 50 un 2,65%) y pérdidas en otros (el Dow Jones cae un 0,42%).
'La prima de riesgo, que es el rendimiento que se le exige a la renta variable frente a otros activos sin riesgo, se ha incrementado de forma importante en 2004', según Víctor Peiró, responsable de análisis de Caja Madrid Bolsa. 'Y lo ha hecho fundamentalmente por factores que no son ni económicos ni empresariales, ya que éstos están dando muestras de fortaleza', añade.
Dos de los factores que más han contribuido a elevar la prima de riesgo empiezan a suavizarse. Por un lado, el anuncio del aumento de la producción ha cortado la escalada del crudo (en dos semanas el precio del barril de brent ha bajado un dólar). Y, por otro, comienza a vislumbrarse una salida a la compleja situación que atraviesa Irak con la nueva resolución de la ONU.
'Cuando se cierren los focos de incertidumbre, los inversores volverán a centrarse en los fundamentales de las compañías, que en la mayoría de los casos ofrecen unas valoraciones atractivas y con potencial alcista', señala Jordi Falgueras, jefe de análisis de Gaesco Bolsa.
La combinación de una tendencia vendedora que se inició a finales de febrero, y que se agudizó tras los atentados del 11-M, y de uno s buenos datos empresariales ha abaratado el precio de las acciones. En concreto, el PER del Índice General de la Bolsa de Madrid -ratio que indica el número de veces que el beneficio está contenido en la cotización y que sirve para saber si la renta variable está más o menos cara tanto desde un punto de vista histórico, como en comparación con otros activos- se ha situado en el entorno de las 17,2 veces. Este nivel es el más bajo desde mayo de 2003, justo cuando comenzó el último rally alcista del mercado.
¿Está pues la Bolsa barata? Los expertos creen que sí, aunque con matices. 'El corto plazo de los mercados financieros queda marcado por la coincidencia de varios focos de incertidumbre. Seguimos pensando que a medio plazo se impondrán los fundamentales que avalan una recuperación de la renta variable: crecimiento económico, beneficios y valoraciones', explican los analistas de Banif en su informe de estrategia del mes de junio. 'Sin embargo, a corto plazo prevalecen los riesgos (cambio en la política monetaria, petróleo y tensión geopolítica) por lo que hay que extremar la prudencia en las decisiones de inversión'.
Los expertos de Urquijo Bolsa señalan en su último boletín mensual que, en los niveles actuales, no merece la pena deshacer posiciones en el caso de carteras sobreponderadas en renta variable. A su juicio, el precio del petróleo debería continuar su descenso y el endurecimiento de la política monetaria en EE UU no es algo que se pueda calificarse de sorprendente, 'aunque sí asustaría un encadenamiento de subidas rápidas'. El mercado espera que se anuncie la primera subida de tipos tras la reunión que mantendrá la Reserva Federal el próximo 30 de junio, que podría ser incluso de 50 puntos básicos.
Lo que sí parece claro, a tenor de los últimos informes de situación de las casas de Bolsa, es que la renta variable europea ofrece una valoración más atractiva que la estadounidense. 'Después de tres ejercicios con un mejor comportamiento relativo de EE UU frente a Europa, parece que durante 2004, el Viejo Continente se perfila como él área de inversión favorecida', explican los analistas de Urquijo Bolsa.
A pesar del mal comportamiento de los mercados en mayo, en el acumulado del año, Europa muestra un mejor comportamiento relativo que en EE UU. Según Urquijo Bolsa existen ciertos factores que llevan a pensar que esta situación debería continuar: el factor recuperación todavía se puede jugar en Europa, ya que el ciclo económico va por detrás del americano; las subidas de tipos de interés se retrasan en el área euro (primer trimestre de 2005) frente a EE UU (verano de 2004); la reciente depreciación del euro frente al dólar; valoraciones 'razonables' y mejores resultados empresariales.
En este sentido, Morgan Stanley recomienda cautela a los inversores en cuanto a la estrategia de inversión en renta variable en EE UU de cara a 2005, a pesar de que las revisiones de estimaciones de beneficios han alcanzado 'niveles históricos'. Según los cálculos del banco de inversión, mientras las ganancias en 2004 del S&P 500 se incrementarán en un 16% frente a 2003, el próximo año la mejora de los beneficios se desacelerará hasta un ritmo del 7%.
Morgan Stanley ha revisado a la baja su objetivo para el S&P 500 a diciembre de 2004, de 1.300 puntos a 1.200. 'Desde una óptica positiva habría que destacar que un 71% del valor del mercado procede de los beneficios actuales, lo que contrasta con el 41% alcanzado durante la burbuja', explican estos expertos. 'El dato negativo estaría en el hecho de que con el fin de la etapa desinflacionista es muy probable que los múltiplos hayan tocado techo', añaden.
Si se despejan las actuales incertidumbres que lastran al mercado, los analistas señalan que para beneficiarse del mayor potencial alcista que ofrecen las plazas europeas frente a la estadounidense, es necesario reposicionar las carteras. Ello se debe a que en los últimos meses las preferencias de los inversores han girado hacia sectores más defensivos, en detrimento de aquellos más cíclicos. Los primeros empezarían a estar sobrevalorados: el sector de bienes de consumo de la Bolsa de Madrid, por ejemplo, ha pasado de cotizar a un PER de 18,6 veces en enero, a hacerlo a un múltiplo de 24,58 veces en mayo.
La primera quincena de julio, cuando publicarán la mayor parte de las compañías estadounidenses sus resultados del primer semestre, se presume clave para este posible giro alcista. 'Nuestra apuesta por fundamentales en Europa se basa en los sectores más cíclicos: industria, tecnología, telecos y ocio', señala Falgueras. Otro sector que también podría beneficiarse de un entorno de tipos moderadamente al alza es el asegurador, según este experto. 'En España, nos parecen valores atractivos Arcelor, Acerinox, aunque ya ha recogido en parte las buenas expectativas, Iberia, Telefónica y Amadeus. Los dos grandes bancos también cotizan a múltiplos interesantes. Nos decantaríamos por el BBVA a corto plazo, por su perfil menos arriesgado, y por el Santander para el largo', añade Falgueras.
Caja Madrid Bolsa, por su parte, confecciona su cartera con aquellos valores que en su opinión batirán la revalorización del Ibex 35 de aquí a final de año, que ellos sitúan en el 12%. Telefónica, BBVA, Sacyr Vallehermoso, Ferrovial, Arcelor, Amadeus, Iberia, NH Hoteles, Sol Meliá, Zeltia, Aldeasa, Ebro Puleva y Telepizza componen la lista.
Estrategias basadas en los beneficios
Los analistas de Smith Barney, una de las divisiones de Citigroup, han publicado esta semana un estudio acerca de la rotación de sectores en las carteras de renta variable europea y su relación con los beneficios empresariales.
La conclusión a la que llegan estos expertos es que, con la excepción del energético, los sectores más cíclicos, y con mejores perspectivas de beneficios (materiales básicos, tecnología, bienes y servicios cíclicos, telecomunicaciones y bancos) han sido los que peor comportamiento han tenido en Bolsa durante los últimos tres meses. Por el contrario, todos aquellos sectores más defensivos y cuyo momentum de resultados es más modesto (alimentación, automóviles, salud, distribución minorista, química y bienes y servicios no cíclicos), han batido al mercado en este periodo.
¿Se han convertido aquellos sectores con mayor potencial de beneficios demasiado caros en relación con aquellos que ganarán menos? Desde Smith Barney creen que este comportamiento no responde a una cuestión de valoración sino a dudas acerca del crecimiento económico, aceleradas por las últimas declaraciones de la Reserva Federal y el reciente tirón del precio del crudo.
'El desajuste entre los beneficios y la evolución de las acciones es típico en un mercado en el que se busca un punto de inflexión', explican. Smith Barney distingue dos tácticas diferentes dentro de una estrategia de inversión basada en los beneficios empresariales: apostar por aquellos sectores que gozan de un mejor momentum de ganancias (bottom-up) o decantarse por aquellos valores cuyas perspectivas de beneficios actuales son peores (top-down), intentando anticiparse con ello a un cambio económico y, consecuentemente, bursátil.
Estos expertos creen que el punto de inflexión que busca el mercado no se materializará. 'Es muy probable que el rebote de los beneficios haya llegado ya a su cota más alta. Sin embargo, no vemos que se vaya a producir una caída tan aguda de los resultados como la que el mercado ha empezado a descontar', comentan.
Smith Barney recuerda que en los meses de abril y mayo de 2003 sí funcionaron las estrategias top-down, por las que ellos mismos apostaron. Entonces los sectores defensivos tenían mayor visibilidad de beneficios pero las condiciones económicas empezaban a mejorar. Quién apostó entonces por los valores más cíclicos se subió a la ola del último rally que ha vivido el mercado, que ha durando hasta febrero de este año.
Sin embargo, el top-down no siempre funciona. Tras el 11-S muchos de los indicadores adelantados rebotaron con vigor y la Fed bajó los tipos. No fue suficiente. Las previsiones de beneficios de los sectores más afectados por los atentados no repuntaron, y quienes apostaron pos sus acciones tuvieron minusvalías.
'En el actual contexto del mercado, nuestra estrategia es botton-up, es decir, pensamos que el castigo sufrido por los sectores más cíclicos es excesivo, sobre todo en sectores como finanzas y telecomunicaciones, puesto que no esperamos una fuerte desaceleración económica en 2005', concluyen.
Lejos de la burbuja
Morgan Stanley ha rebajado su objetivo para el S&P 500 por el menor crecimiento de beneficios previsto para 2005. No obstante, descarta una sobrevaloración excesiva ya que un 71% del valor del mercado procede de las ganancias empresariales, frente al 41% de la época de la burbuja.
Mes propicio para 'cazar' dividendos
A la espera de que se disipen las actuales incertidumbres que pesan sobre la renta variable, las estrategias de inversión basadas en valores sólidos, con una buena rentabilidad por dividendo, siguen constituyendo una alternativa interesante.En este sentido, los próximos 30 días suponen uno de los periodos más activos del año para los cazadividendos.Hasta 14 compañías que del mercado continuo ya han confirmado que retribuirán a sus accionistas durante este tiempo, según datos de Renta 4. Es más, algunas de ellas harán efectivo su único desembolso anual (Gamesa, Indra y Móviles).La mayor concentración de pagos de dividendo se dará el 1 de julio: Banco Popular, Endesa, Gas Natural, Iberdrola, Red Eléctrica, Unión Fenosa y Repsol. Completan la lista en este periodo Altadis, Banesto y Metrovacesa.El pago del dividendo tiene también su efecto en el comportamiento de las acciones, puesto que el precio de éstas suele recoger el importe de la retribución aproximadamente tres semanas antes de que éste se haga efectivo, para descontarlo inmediatamente después de que se haya abonado.
Las divisas dan un respiro
Antes de la escalada del crudo, los mercados estuvieron muy atentos a la fuerte apreciación del euro frente al dólar. La moneda europea marcó máximo histórico el 17 de febrero, al cerrar a 1,284 dólares (al día siguiente, en negociación intradiaria llegó, a cambiarse a 1,29 dólares).La fortaleza del euro lastró a las compañías exportadoras europeas y llegó a suponer una amenaza para la reactivación económica de la región.Desde entonces, el euro entró en una fase de corrección (se ha depreciado un 6,4% desde máximos) y se ha instalado en el último mes en una banda situada entre los 1,18 y los 1,22 dólares.'Las expectativas de un inminente cambio en la política monetaria de EE UU dotan al dólar de un suelo claro en el entorno de los 1,23 euros', señalan desde Banif. 'Al mismo tiempo, la persistencia de los principales desequilibrios que desencadenaron su debilitamiento (déficit comercial y fiscal) impiden que la divisa estadounidense avance posiciones más allá de los 1,18 euros', añaden.Desde Banif esperan que las divisas se mantengan a corto plazo en la banda referida anteriormente, ya que el mercado está centrado en otros focos de incertidumbre.