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Turismo

El 'todo incluido' irrumpe en Andalucía con 10 proyectos

La Costa del Sol estrena a gran escala, con la apertura del primer hotel en Benalmádena, la llegada de un modelo típico del Caribe y Canarias: el todo incluido. El proyecto llega con polémica y prevé 10 complejos.

Una pulsera da acceso a las salas de cine, a la discoteca, al servicio de guardería, al menú de los restaurantes y, por supuesto, a la habitación. Y todos estos servicios sin salir del mismo hotel en el que se ha contratado la estancia. Es el modelo turístico todo incluido, que ha llegado con fuerza a Andalucía, en Benalmádena (Málaga), de la mano del Grupo Inmobiliario Peñarroya.

El pasado fin de semana abrió sus puertas el hotel Holiday Village para acoger a los primeros cientos de turistas británicos e irlandeses. Un hotel de 360 habitaciones y 300 empleados situado a pie de playa y que es sólo la primera piedra de una importante iniciativa turística.

Se trata del proyecto Holiday World, en el que el grupo promotor malagueño Peñarroya invertirá 600 millones de euros en los próximos años para poner en pie un macrocomplejo vacacional con 10 hoteles (13 según las previsiones más optimistas que maneja el grupo). Todo este complejo se levantará sobre más de 400.000 metros cuadrados que son propiedad de Peñarroya desde hace más de dos décadas.

Benalmádena tendrá el mayor número de plazas hoteleras de la Costa del Sol

En total, se prevé contar con 10.200 camas, lo que situará a Benalmádena como el primer municipio de la Costa del Sol por plazas hoteleras.

'Queremos acabar con el antiguo estilo de oferta turística en el que sólo hay una cafetería en el pueblo y que además cierra a las diez de la noche', aseguran fuentes del grupo promotor. Para ello, este primer hotel cuenta con un pub irlandés con capacidad para casi mil personas.

Este modelo en el que el cliente tiene todos los servicios a su alcance sin salir del hotel tiene un claro destinatario: el turismo familiar. Una pareja con dos hijos que venga desde un país europeo pagará alrededor de 3.000 euros por una estancia de una semana en temporada alta.

El primer hotel del complejo tiene asegurado un alto nivel de ocupación todo el año porque Peñarroya ha alcanzado acuerdos con el mayorista británico First Choice, que abonará un canon al constructor llene o no el hotel. Un acuerdo similar se ha firmado con My Travel para el segundo hotel, que tiene prevista su apertura dentro de 10 días y tendrá 184 habitaciones.

El grupo Peñarroya desarrolla actividades inmobiliarias y hoteleras por las que espera facturar este año, en conjunto, más de 83 millones de euros, con un beneficio bruto de unos 30 millones. El grupo prevé acabar el año con más de 555 empleados en plantilla.

La llegada del modelo todo incluido no es una novedad en la Costa del Sol, donde ya existen algunas experiencias previas de menor envergadura como las del Club Mediterranée, en Marbella. También hay establecimientos de esta clase en Cádiz y Huelva.

Polémica

La polémica sobre la instalación de estos hoteles comenzó el pasado enero durante la presentación del macroproyecto en la feria del turismo Fitur.

Los responsables del grupo Peñarroya lanzaron la idea de que el modelo turístico de Torremolinos y Benalmádena es, en muchos casos, el mismo que el de los años sesenta. Sin nombrar al resto de establecimientos, dijeron que los hoteles del todo incluido son los que hay que construir en Andalucía.

Estas declaraciones no sentaron bien en la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol.

Su presidente, José Prieto, asegura que no es partidario del modelo todo incluido en una zona como la costa malagueña en la que hay tantos atractivos fuera del establecimiento.

Gonzalo Fuentes, responsable de Turismo de CC OO en Málaga, ha avisado de que este modelo, que llega hasta las 30.000 plazas hoteleras en Canarias y Baleares, ha provocado en esas comunidades una 'caída en picado de la oferta turística complementaria'.

Debate sobre el modelo turístico.

'Hay turistas para todos los hoteles'Miguel Sánchez, responsable de Turismo en la Confederación de Empresarios de Andalucía, cree que con los casi 19 millones de visitantes que pasaron por la comunidad en 2003 hay clientes para todos. 'No creo que este modelo perjudique a nadie: todos los hoteleros tienen que ponerse las pilas, ser competitivos y no perder el tiempo en polémicas inútiles'.'La Costa del Sol no es el Caribe'José Prieto, presidente de la Asociación de Hoteleros de la Costa del Sol, estima que éste no es el modelo más adecuado para una zona tan rica en atractivos turísticos como la costa malagueña. 'En el Caribe no hay, fuera del hotel, la variedad de oferta de ocio, natural o de restauración que hay aquí'. Prieto afirma que este modelo no anima al turista a salir del hotel.'Ojalá este proyecto sea un revulsivo''La apertura de este hotel y los que vengan tiene que servir para impulsar y desarrollar la oferta turística complementaria', según Luis Pérez, presidente de la Asociación Empresarial de Agencias de Viajes de la Costa del Sol. 'Puede haber un trasvase de turistas de un modelo de vacaciones a otro pero no creo que el todo incluido se vaya a extender mucho en esta zona'.

'æpermil;ste no es el mejor producto'

La llegada de estos hoteles a zonas como Baleares y Canarias ha provocado el cierre de numerosos establecimientos de restauración, según Gonzalo Fuentes, secretario de Turismo de Comisiones Obreras en Málaga. 'No creo que éste sea el mejor producto para una zona en la que la oferta complementaria de ocio y restaurantes emplea a más de 25.000 personas'.

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