Bayer entra en pérdidas récord por el coste de su reestructuración
Bayer cerró 2003 con unas pérdidas netas récord de 1.361 millones de euros, frente a los beneficios de 1.060 millones de un año antes. Estos son los primeros beneficios negativos anuales que sufre desde 1969 el tercer grupo químico de Europa, en plena reestructuración de su modelo de negocio.
La empresa redujo su facturación anual un 3,5%, hasta los 28.567 millones de euros, en comparación con el volumen de negocios del ejercicio anterior. El presidente del grupo, Werner Wenning, explica en un comunicado que estas cifras son el resultado del pago de elevadas amortizaciones, los costes de la escisión de la compañía y de la consolidación de algunas ubicaciones. Aaseguró que, a pesar de las pérdidas, la compañía repartirá un dividendo de 0,5 euros, al entender que disponen de solidez financiera y "estar convencidos de su futura rentabilidad".
Las cuentas del grupo germano se han visto lastradas además por las cargas derivadas de los 2.224 acuerdos extrajudiciales logrados en Estados Unidos por el caso Lipobay, -polémico medicamento que en ese país se comercializa como Baycol-, que a principios de este mes de febrero ya ascendían a 690 millones de euros.
El coste de la reestructuración
El pasado 7 de noviembre, Bayer decidió reestructurar sus negocios y segregar las divisiones de química y plásticos para agruparlas en una nueva empresa, que saldrá a Bolsa a principios de 2005. La farmacéutica anunció también que se concentrará en su núcleo de actividades farmacéutica, alimentación y materiales nobles para segregar los químicos y parte de su negocio de plásticos en una firma con el nombre provisional de NewCo. Durante la presentación de resultados, Werner Wenning confirmó que su nombre definitivo será Lanxess.
Esta revisión de su modelo de negocio supuso un coste de 2.200 millones de euros que se contabilizó en el cuarto trimestre, lo que ha influido negativamente en el balance anual del gigante alemán.
Lanxess integrará las actividades químicas y contará con 20.000 empleados. Según las estimaciones de la propia Bayer, registrará un volumen de negocio anual de 5.600 millones, aunque deberá arrancar con una deuda heredada de 1.700 millones. Su futuro presidente, Axel Heitmann, avanzó en su presentación que tendrá una cartera de 5.000 productos agrupados en 40 sociedades y 20 países. En 2005, la nueva empresa saldrá a bolsa con un nuevo nombre y una calificación 'triple B', si se cumplen sus planes.