La mayor empresa del mundo de trabajo temporal, Adecco, trata de dar por cerrada la crisis originada por las investigaciones que se están llevando a cabo sobre sus cuentas.
La compañía comunicó ayer que 'no hay pruebas sobre actividades de apropiación indebida o irregularidades que puedan ser financieramente significativas'. A principios del mes pasado la multinacional suiza anunció el aplazamiento, sin fecha, de la presentación de sus cuentas de 2003 por 'debilidades' detectadas en la filial estadounidense y 'en otros países'.
La empresa también anunció que mantiene la confianza de sus principales accionistas, descartando una posible salida de su capital del multimillonario Klaus Jacobs, que cuenta, a través de KJ Jacobs, con el 11,7%. Jacobs es el segundo mayor accionista privado de Adecco tras la firma Akila Finance, que tiene un 19,5%.
La compañía hizo público su deseo de que Philippe Foriel-Destezet, representante de Akila, sea reelegido en el comité directivo y de que Jacobs, que dejó su puesto en el comité en 2002 a su hijo, vuelva a él.
El propio Jacobs había declarado recientemente que el presidente de la compañía, Jerome Carille, debía mejorar o dejar la firma.
Los inversores aplaudieron el compromiso de los principales accionistas y auparon la cotización de Adecco, cuyas acciones se alzaron un 3,79%.
Se trata de la mayor subida desde el pasado 30 de enero. En aquella ocasión la acción escaló un 14% después de que la empresa comunicara que los problemas detectados no eran 'significativos en términos financieros'.
El 12 de enero el valor en Bolsa de Adecco se desplomó un 35% cuando informó sobre 'debilidades esenciales en los controles internos' de su filial estadounidense. Desde entonces el valor se ha ido recuperando gracias a los comunicados que ha enviado la empresa restando importancia a los problemas detectados. Pero esa política de información también ha sido investigada por la Bolsa helvética, ya que sospecha que se primó con diversos datos a diversos medios de comunicación y analistas.
Adecco todavía no ha dado una fecha para presentar sus resultados de 2003 y encara demandas de accionistas presentadas en EE UU.