El Ibex registra la mayor caída de Europa y pierde los 6.500 puntos
Las pérdidas en Wall Street por las palabras de cautela que pronunció ayer el presidente de la Reserva Federal sobre la rezagada evolución económica se dibujó con más firmeza. Los parqués del viejo continente perdieron fuelle, alejándose de los máximos de ayer. Así, el Ibex retrocedió un 2,13%, hasta los 6.429 puntos.
El resto de índices también cayeron, salvo Londres que se mantiene estable ligeramente por encima de los 4.000 puntos. París cedió un 1,1% y Francfort un 1,3%, tras anunciar la Oficina de Empleo los últimos datos de paro en Alemania. En abril, casi 4,5 millones de personas carecían de un puesto de trabajo, 112.700 menos que el mes anterior. Desde ese país llegaba asimismo el balance del banco Commerzbank, que anunciaba esta mañana un aumento en sus beneficios de 3 millones de euros hasta marzo. Otro banco, el francés BNP Paribas ha comunicado hoy sus beneficios, que cayeron un 5,6%, aunque menos de los esperado, por el aumento de provisiones y gastos. Su presidente ha advertido sobre la volatilidad que afectará en lo venidero al sector bancario europeo.
En el índice español, BBVA, SCH y Popular acusaron el pesimismo del sector. Terra, que ha vuelto a arrojar pérdidas en el primer trimestre, de 56 millones, se mantuvo prácticamente invariable hoy en 4,81 euros. Atrás ha quedado el imparable ascenso de Sogecable, que perdió un 2,9%, después de que Telefónica desmintiera el rumor que corría por el mercado respecto de su intención de hacerse con la participación del 21% que tiene Vivendi en Sogecable. "Es infundado", comunicó la operadora española que aseguró que su estrategia va encaminada a reducir su presencia en el negocio de medios de comunicación, "como demuestra la venta de parte de Antena 3".
En la pasada jornada, la incertidumbre sobre la marcha de la economía estadounidense preocupó más que las referencias macro que fueron anunciándose en Europa. Los inversores ansiaban conocer las advertencias de Greenspan y su decisión sobre el precio del dinero, haciendo caso omiso al incremento del déficit presupuestario francés, la caída del índice de gestores de compra europeos y el mantenimiento en el 2% del crecimiento económico español. Tal y como se esperaba, la Reserva Federal mantuvo ayer invariable los tipos de interés en el 1,25%, su nivel más bajo desde 1961. Los riesgos de la economía están equilibrados, pero la posibilidad de una "sustancial caída de la inflación" es superior a la de un repunte, aseguró Greenspan. Los inversores, que acusaron un pesimismo transitorio, asumieron el discurso y sus exiguas compras permitieron a Nueva York cerrar en positivo.