'Las murallas chinas no solucionarán por sí solas los conflictos de intereses'
Nuestra meta es ser el primer banco de inversión en Europa, y por ello también queremos ser el primer banco de inversión en España'. El responsable de inversión para Europa de JP Morgan, Klaus Diederichs, asegura en declaraciones a Cinco Días que la península es uno de sus grandes pilares en el continente.
Por ello, el banco ha decidido incrementar el crecimiento en áreas en el país como en gestión de activos, en el negocio de fondos de pensiones. También van a incrementar su tamaño en banca privada, aunque se concentrarán en el segmento alto de la clientela. El pasado año, vendió a BNP Paribas su negocio de banca privada de menor poder adquisitivo. 'Estamos satisfechos con nuestro equipo y nuestra presencia en España', afirmó.
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Sin embargo, Diederichs descartó que JP Morgan tenga pensado llevar a cabo adquisiciones para incrementar su tamaño. 'El primer crecimiento vendrá orgánicamente, ganando cuota de mercado a los competidores; y creo que tenemos un potencial significativo de generar este aumento de negocio'.
El directivo, que lleva 23 años en el banco estadounidense, cree que este modelo de negocio es el más adecuado para JP Morgan, y que le permitirá capear el mal momento de la renta variable. 'Nuestra estrategia es, precisamente, ser un grupo de servicios financieros diversificado, y tener una oferta de productos más amplia que la de nuestros rivales'.
Esta diversificación es la que, según el managing director, ha permitido a JP Morgan no haber sufrido tanto la crisis bursátil. 'El negocio no ha ido tan mal en los mercados de deuda, y hemos tenido suerte de que esto nos haya permitido compensar las pérdidas en la renta variable'.
Respecto a los conflictos de intereses que han afectado a la gran banca de inversión de EE UU, el directivo cree que las medidas legales como las murallas chinas no son suficientes para acabar con estos conflictos. 'Las medidas legales como las murallas chinas no solucionan la cuestión por sí solas. El problema es de actitud: hace falta ética en el negocio'. Diederichs matizó que 'en los acuerdos que alcanzaron los distintos bancos de inversión con la SEC el pasado lunes 28 de abril, JP Morgan tuvo un papel muy secundario'. La banca de Wall Street firmó la paz el pasado lunes con el fiscal Eliot Spitzer con una multa de 1.270 millones por conflicto de intereses entre los departamentos de análisis y el banco. De esta cantidad, JP Morgan tendrá que abonar 30 millones, la menor cuantía de todas las multas impuestas.
El directivo aseguró que los casos de 'abusos en los métodos contables', como el de Enron, que 'desgraciadamente han ocurrido' se han debido a 'personas que han abusado del sistema'. El ejecutivo, sin embargo, recalcó la inocencia del banco. 'JP Morgan no ha abusado del sistema y tampoco ha apoyado que nadie abusara de él'.