España grava los beneficios con un 35%, frente al 31,68% de media de la UE
La tarifa del impuesto sobre beneficios de las sociedades se mantuvo en España en el 35% en el últimos año, frente al 31,68% de media aplicado en las empresas de la Unión Europea. En Europa, únicamente Alemania (39,58%) e Italia (38,25%) tienen el tipo más alto que España.
Un informe elaborado por el área fiscal del bufete KPMG Abogados destaca que el impuesto sobre los rendimientos de las empresas se ha estancado en España en el último año, mientras que se han producido unos ligeros descensos en otros países del entorno. El estudio, que analiza la evolución de la fiscalidad sobre los beneficios en un total de 68 países de la OCDE, Asia y Latinoamérica, concluye que España está por encima del gravamen aplicado, en media, tanto de la UE como de la OCDE.
El tipo medio aplicado en España es del 35%, frente al 31,68% de media de los países de la Unión Europea. Así, España supera ahora a la UE en más de tres puntos, frente a los 2,47 puntos de enero de 2002. La media europea, a su vez, supera en casi un punto a la media registrada en la OCDE. Desde el año 1996 el tipo medio aplicado en la Unión Europea ha descendido desde el 39% hasta el citado 31,68%; mientras tanto, en la OCDE ha caído desde el 37,5% hasta el 30,7%.
En la unión Europea la tarifa que grava los rendimientos de las empresas se redujo un punto porcentual en el último año, y pasó del 32,53% al 31,68%. Entre los países que más han reducido el gravamen a los beneficios de las sociedades en la Unión Europea destacan Bélgica, con 6,18 puntos, Irlanda, con 3,5 puntos, e Italia, con 2 puntos.
En el lado contrario se encuentra Alemania, que aumentó desde el 38,26% en enero de 2002 hasta el 39,58% de enero de 2003.
Baja en la OCDE
En la OCDE, en términos medios el gravamen ha pasado del 31,39% al 30,79% que tienen hoy en día. Las reducciones más significativas han sido protagonizadas por Canadá (con un 38,6% en 2002 y un 36,6% en 2003) o Polonia, que ha pasado del 28% al 27% en el mismo periodo. Las subidas más fuertes se han producido en los países latinoamericanos, con alzas de hasta cinco puntos en Uruguay o de cuatro en Costa Rica.
Al igual que España, ha habido muchos países que en el último año han mantenido el tipo de gravamen del impuesto estable. Es el caso de Francia (34,33%), Portugal (33%) o Reino Unido (30%). En los países de América Latina, zona en la que se han localizado importantes flujos de inversiones españolas en los últimos años, han reducido el impuesto países como México, del 35% al 34%, o Perú, desde el 30% al 27%.
Como conclusión, el área fiscal de KPMG Abogados asegura que se sigue estrechando el diferencial existentes entre los países más industrializados y los países en desarrollo. Las economías de la zona de Asia han mantenido su tónica de los últimos ejercicios, con un ligero descenso del tipo medio, que está ya en el 30,36%, frente al 31,05% de hace un año.
Aunque el tipo medio no descendió en términos normativos en España en el último año, se produjeron determinadas modificaciones que en la práctica suponen una reducción de la fiscalidad sobre los beneficios de las sociedades. Las compañías con ingresos inferiores a cinco millones de euros aplican una tasa del 30% a los primeros 90.151 euros que declaren como beneficios y un 35% para el resto de sus beneficios.
Desde el 1 de enero de 2003 los beneficios obtenidos por la venta de activos inmovilizados verán reducida esta tasa impositivamente un 20%, para quedarse en un 15% final si dichos ingresos extraordinarios son reinvertidos por la sociedad que vende.