La crisis bursátil se ha llevado por delante al 10% de la plantilla del sector
Un broker de una conocida firma francesa explicaba la semana pasada que las oficinas de intermediación de muchos bancos extranjeros presentes en España se están quedando vacías. 'Algunos funcionan sólo como oficina de representación, los equipos de ventas y de análisis ya no existen', señaló este intermediario.
En los últimos dos años los despidos son un tema recurrente entre los profesionales financieros. Los datos que normalmente aparecen en los medios de comunicación cifran los recortes de plantilla en miles y a veces en decenas de miles. Sin embargo, si tenemos en cuenta el porcentaje que estos despidos representan sobre el total, las cifras no parecen tan espectaculares.
Desde que en abril de 2001 el número de empleados por las firmas de inversión estadounidenses alcanzara su punto máximo -786.100 empleados, de acuerdo con las estadísticas del Departamento de Trabajo de Estados Unidos-, la cifra de trabajadores en el sector se ha reducido un 10,11%, hasta 706.600 a finales de enero.
Esta disminución de 79.500 empleados en menos de dos años representa la mayor oleada de despidos que ha vivido el mundo financiero estadounidense en los últimos 25 años. No obstante, la angustia sigue viva entre los profesionales del sector que aún conservan su puesto de trabajo. Conscientes de que los beneficios de las firmas de Bolsa siguen cayendo y que los volúmenes de negocio descienden sin freno, reconocen que aún sobra gente en las plantillas. 'Estamos sobredimensionados', apunta un gestor de fondos de un banco suizo con fuerte presencia en EE UU.
El actual número de empleados en las firmas de Wall Street es muy parecido al que registraban en 1999, en pleno apogeo de las fusiones, las salidas a Bolsa y la cultura del capitalismo popular. La realidad hoy es otra. El volumen recaudado por las OPV en Estados Unidos cayó el 40% en 2001 y un 38% en 2002, hasta la cifra más baja de los últimos 11 años, 28.900 millones de dólares, según datos recopilados por Bloomberg. La actividad de las fusiones y adquisiciones descendió a nivel global un 50% en 2001 y un 24% en 2002, según Thomson Financial. Asimismo, y de acuerdo con las cifras de la Bolsa de Nueva York, en 2001 las entidades estadounidenses ganaron un 50% menos que en 2000, mientras que en los nueve primeros meses del año anterior, los últimos disponibles, el descenso ha sido del 22,5%.
España, al mismo ritmo
En el último año, el número de trabajadores en las firmas de Bolsa españolas se ha reducido un 8%. Pese a que en España el universo financiero es mucho más modesto (4.319 trabajadores a finales de 2002 frente a 707.600 de EE UU), el ritmo de despidos es similar a que ha marcado Wall Street. Asimismo, el descenso en el número de empleados en 2002 coincide con el esfuerzo de las compañías por reducir sus gastos de estructura, que cayeron el 7,31% ese mismo ejercicio.
No obstante, las sociedades de valores y firmas de Bolsa que operan en España disminuyen su beneficios a un ritmo algo mayor que en EE UU. Si en 2001 el beneficio se redujo un 55,9%, el año pasado descendió un 28,88%.
La crisis bursátil también se ha dejado notar en el volumen que se ha negociado a través de los miembros de la Bolsa de Madrid. En este sentido, de los 393.278 millones de euros que movieron en el año 2000, el máximo de todos los tiempos, se ha pasado a 308.232 millones en 2002, una caída del 21%.