Endesa reduce sus beneficios un 14,1% tras sanear activos por 1.169 millones
Endesa ha optado por el saneamiento dado su riesgo en América Latina. La compañía que preside Manuel Pizarro, la primera eléctrica española, ha reducido sus beneficios un 14,1% en 2002, hasta 1.270 millones de euros tras destinar 1.169 millones a saneamientos de activos y provisiones para cubrir problemas futuros; esas operaciones tuvieron un efecto por 802 millones en los resultados. En esta línea, la compañía señala que, de no haber materializado esas medidas, su beneficio se habría incrementado un 40%.
Y su consejero delegado, Rafael Miranda, destacó otros datos para mostrar la mayor fortaleza de los resultados: el cash flow operativo (Ebitda) alcanzó los 5.278 millones, con una subida del 5,5%, mientras que el resultado de las actividades ordinarias mejoró un 43,4%.
Pero las cifras del ejercicio lo que también evidencian es la evolución positiva del negocio eléctrico en España. El resultado neto de explotación del mercado nacional ascendió a 2.131 millones, con una mejora del 18,5%, pese a la venta de Viesgo. Endesa, que se ha beneficiado como otras eléctricas del reconocimiento por parte de Economía del llamado déficit tarifario, considera que el aumento citado se debe tanto a que el grupo generó más energía como a los mayores precios en el pool (mercado mayorista de generación).
Por el contrario, el beneficio de explotación de la actividad de electricidad en América Latina ascendió a 1.268 millones y, aunque aporta el 35,4% del total de resultado de explotación, experimentó un descenso del 10,9%. Esta caída se debió a las devaluaciones de las monedas de Argentina y Brasil. Y Miranda destacó que se han dotado ya provisiones que cubren el riesgo directo e indirecto por las inversiones realizadas y los préstamos concedidos a sus filiales en Argentina. En otras palabras, 'el valor de los activos netos de Endesa en Argentina en los fondos propios del grupo es actualmente cero'. Con esta situación, según Miranda, 'la evolución en ese país sólo puede ir a mejor'.
El papel de Auna
Las telecomunicaciones comienzan a no ser una rémora en los resultados de la eléctrica, ya que la operadora de telecomunicaciones Auna, en la que participa, aumentó sus ingresos un 35%, mientras que la filial de móviles Amena obtuvo un beneficio neto de 101 millones. Y Miranda reiteró que telecomunicaciones, al igual que otros negocios, debe ser autosuficiente, por lo que Endesa no realizará nuevas aportaciones. Pero en su filial chilena en esa área, Smartcom, efectuó una amortización extraordinaria del fondo de comercio.
Con la reducción de la deuda financiera en 2.260 millones, además de la evolución descrita de sus principales actividades, Endesa cumple con los objetivos del plan estratégico, destacó su consejero delegado. Y los costes financieros disminuyeron en 222 millones, con un descenso del 15,2%.
Sin embargo, Rafael Miranda no comprometió cifras respecto a la reducción del endeudamiento en el futuro, que actualmente se sitúa en 22.747 millones. El cumplimiento de ese objetivo, al que no se renuncia, está relacionado básicamente con la obtención de ingresos y plusvalías por la venta de activos.
El plan estratégico de Endesa prevé unos ingresos entre 6.500 a 7.000 millones de euros en el periodo 2002-2006 y ya ha obtenido más de 3.200. En este ejercicio serán superiores a los 1.000 millones, aunque la cifra final depende de la venta del 50% de la filial de energías renovables, que intermedia Caja Madrid. También prevé desprenderse del 3% de Repsol y del 11,6% de Aguas de Barcelona cuando la evolución de los mercados permitan la obtención de plusvalías.
En lo que el equipo directivo se está empleando a fondo es en mejorar los vencimientos de la deuda, especialmente en el caso de Enersis. También la emisión de participaciones preferentes por 2.000 millones de euros servirá para refinanciar deuda de la matriz. La ortodoxia financiera se completa con la contención de las inversiones, aunque Miranda descartó parar la construcción de ciclos combinados.
América Latina
El grupo eléctrico se enfrenta a este ejercicio con una reducción de su esfuerzo en América Latina, pese a que sus responsables se muestran optimistas sobre la evolución de sus negocios en esa zona. Pero las inversiones allí bajarán a 614 millones de euros desde los 800 millones del año anterior.
Endesa anunció que propondrá el pago de un dividendo de 0,6825 euros, igual que el del año anterior, que supone un pay-out del 56,9%. Ayer subió en Bolsa un 0,47% después de caer un 10% en las dos sesiones precedentes.