Endesa renegocia con la banca la deuda de 7.955 millones de Enersis
Enersis quiere cambiar el calendario del vencimiento de su deuda y Endesa, primer accionista y gestor, ha abierto negociaciones con cerca de 80 entidades, entre las que están todas las grandes mundiales. Pero una petición que el grupo español no acepta es avalar la deuda de la compañía chilena.
Endesa negocia con más de 80 entidades de la banca internacional la refinanciación de la deuda de Enersis, grupo energético chileno del que controla el 65% del capital. El objetivo básico de esta operación, que se basará en la formación de un crédito sindicado por unos 2.300 millones, es modificar las condiciones de las transacciones suscritas por el grupo eléctrico andino para alargar los vencimientos de la deuda.
La deuda financiera del grupo Enersis se eleva a 8.560 millones de dólares (7.955,4 millones de euros), de los que 4.318 millones de dólares corresponden a su filial Endesa Chile. El pasado viernes, Standard & Poor's redujo por segunda vez desde diciembre la calificación de la deuda a largo, que se encuentra ahora en BBB-, a un grado de perder su carácter de 'inversión'.
Una de las peticiones más reiteradas por las entidades financieras en estas conversaciones, pero que seguirá siendo rechazada por el grupo español, es que éste avale la deuda de Enersis. La compañía que preside Manuel Pizarro considera que el grupo suramericano, que ha reducido su deuda un 21% desde los 10.823 millones de dólares de 1999 con los recursos y plusvalías que ha generado, tiene suficiente solvencia propia.
Adicionalmente, Endesa tiene abiertas negociaciones para solventar otro de los puntos básicos del plan estratégico de Enersis; se trata de la ampliación de capital por 2.000 millones de dólares que será sometida a la junta de accionistas el próximo 31 de marzo. La empresa española contribuirá con 1.300 millones de dólares a través de la capitalización de los créditos que el grupo chileno tiene contraídos con la matriz. Pero no realizará, en cualquiera de los escenarios posibles, nuevas aportaciones. 'Sólo ejercitaremos los derechos preferentes a la ampliación que nos corresponden', señalan fuentes de Endesa.
Para que la operación culmine con éxito ha abierto también conversaciones con los accionistas minoritarios de Enersis para que acudan a la ampliación. Aparte de la empresa española con su 65%, el capital de Enersis está controlado básicamente por los fondos de pensiones, con un 12,7%, y las compañías de seguros y otros inversores institucionales, con el 9,8%. Un 4,5% del capital de la empresa andina cotiza en la Bolsa de Nueva York en ADR.
Contactos
Los contactos se mantienen prioritariamente con los primeros accionistas citados, que han reclamado condiciones similares a las de Endesa. Así, podrán capitalizar 700 millones en bonos no convertibles que están en su poder y que tienen un pronto vencimiento. Es decir, podrán acudir a la transacción sin realizar desembolsos, tema casi impensable dada la crisis económica.
Pese a la decisión de Endesa de no elevar sus aportaciones por encima de la capitalización, será preciso llevar a la junta de accionistas del 31 de marzo la eliminación del tope de participación por encima del 65%. Fuentes consultadas consideran que Endesa España podría alcanzar el 70% de Enersis. Paralelamente, los responsables del grupo con sede en Madrid tienen en sus manos dictámenes del organismo que controla el mercado de valores de Chile que aseguran que no estará obligada a lanzar una oferta pública de adquisición (opa) por elevar su participación.
La venta de activos, el otro aspecto del plan estratégico para Enersis, se encuentra en una fase avanzada. Dada la crisis de América Latina y de las energéticas estadounidenses, las más interesadas en esa área geográfica, Endesa y Enersis han optado por poner a la venta activos en Chile, ya que en otros países latinoamericanos hay mucha oferta. Y para las empresas Río Maipo y Canutillar (hidráulica) ha recibido 13 ofertas.
El grupo chileno no podrá repartir dividendos
Aunque el tema deberá ser aprobado formalmente por la junta de accionistas, medios consultados consideran que Enersis no podrá pagar dividendos a cargo del ejercicio de 2002.Y esta conclusión se basa en los resultados del grupo chileno en el pasado ejercicio. La filial de Endesa cerró el pasado año con unas pérdidas por 302 millones de dólares. No obstante, estos resultados negativos son consecuencia de la decisión de incluir provisiones y saneamientos por más de 376 millones de dólares por activos en Argentina y Brasil, con el objetivo 'de reflejar en el balance su valor real'. Enersis se enfrenta, además, a una crisis de su valor en Bolsa, con una cotización última de 52 pesos chilenos. La media de los últimos 12 meses estaba en 66 pesos, pero llegó a cotizar a 222 pesos en enero del 2001.