Muy bajo no significa barato
Credit Suisse comentaba en uno de sus últimos informes de estrategia que, según sus propios indicadores, los mercados de Estados Unidos están profundamente sobrevendidos. Lo que mide este indicador es la magnitud de las caídas, a partir de la desviación de la rentabilidad de los mercados sobre la tendencia.
De este modo, el indicador de sobreventa del banco sólo ha dado siete señales de compra en los últimos 150 años y este año ha dado una, en julio. En los años treinta y en los setenta la situación de sobreventa era más profunda. Paralelamente, alerta que el mercado alcista que se registró hasta marzo de 2000 provocó la mayor sobrecompra de la historia de los mercados de EE UU.
El banco ha puesto en números lo que todos sabemos, esto es, que el mercado bajista actual es uno de los más duros que se hayan registrado nunca. Ahora bien, comenta que las acciones estadounidenses están próximas a su valor objetivo. Pero no están baratas. Volviendo a sus datos, el banco afirma que cada vez que ha saltado su señal de sobreventa los mercados han rebotado, entre un 8% y un 33%. Pero que en un periodo más largo (tres o cinco años) apenas suben.
Ya ha habido rebote. Se desconoce si se ha agotado o aún le queda un poco más de correa. Lo que viene a decir este análisis es coherente con la teoría, bastante extendida últimamente, del mercado alcista dentro de un mercado bajista. El Nikkei llegó a subir un 40% tras la caída de 1989, pero luego volvió a bajar y aún cada pocas semanas marca mínimo de 15, 16 o 17 años.
EE UU, que tiene problemas similares a los de Japón, puede tardar menos en solucionarlos. Pero lo que dice Credit Suisse, que no es precisamente sospechoso de desear mal a la Bolsa, es que bajo no significa barato, por lo que debe abandonarse la idea de que, cuando se toque fondo, volveremos a subir un 30% cada año, como en 1999.