Global Crossing suprimirá 1.600 empleos más
El grupo de telecomunicaciones estadounidense Global Crossing, que se encuentra en quiebra, suprimirá 1.600 empleos adicionales y pondrá a la venta nuevos activos en el marco de un plan de reestructuración más amplio de lo anunciado, informó hoy la empresa.
El recorte de plantilla afectará especialmente en los servicios comerciales y administrativos. Tras diversos ajustes, el número de efectivos del grupo tecnológico será de 6.000 a finales de marzo, frente a los 15.000 de principios de 2001.
El plan de saneamiento contempla igualmente la reducción de los salarios de los directivos y la reorganización de activos inmobiliarios, que se traducirá en el cierre de 71 oficinas y un ahorro de 150 millones de dólares (171 millones de euros).
El presidente de Global Crossing, John Legere, subrayó que esta rebaja de sueldos tiene como objetivo "conservar el mayor número de empleos posibles" y reveló que su propio salario se ha reducido en un 30%.
Los gastos operativos se rebajarán así hasta los 900 millones de dólares (1,028 millones de euros), desde los 1.500 millones de dólares (1.713 millones de euros) de finales de 2001. Esta estimación no incluye las actividades en Asia, que no forman parte del programa de reestructuración.
Además, Global Crossing ha puesto a la venta una red de fibra óptica en Reino Unido y su unidad de teleconferencia, así como su división Global Marine, que se dedica a la instalación y mantenimiento de redes submarinas de fibra óptica.
Legere se mostró confiado en que "al final del proceso de reestructuración, Global Crossing se convertirá en una organización más compacta, más integrada, que ofrecerá una productividad de primera fila que mejorará al mismo ritmo de crecimiento de la demanda".