El Gobierno británico investigará por qué la Bolsa de Londres no compró Liffe
El Gobierno británico ha tomado cartas en el fracaso de la OPA de la Bolsa de Londres sobre el mercado de futuros Liffe. El próximo día 17 los directivos de la Bolsa serán citados a explicar ante un comité del Parlamento, y "por el interés público", por qué razón su oferta no pudo convencer a Liffe, que al final cayó en manos de Euronext por menos dinero.
Necesitamos conocer las razones del fracaso de la Bolsa de Londres" afirmó Nigel Beard, miembro del comité parlamentario del Tesoro. "Si la Bolsa no estaba dispuesta a luchar hasta el final nos interesa saber por qué lanzó su OPA en primer lugar" añadió.
Además de los máximos responsables de la Bolsa de Londres, Jean-François Théodore, presidente de Euronext y Sir Brian Williamson, presidente de Liffe, asistirán a las sesiones del comité para explicar las estrategia que piensa seguir la nueva entidad.
"Cuando la Bolsa nos informó sobre su propuesta de fusión con la Deutsche Böerse [que terminó en fracaso], nos explicó que la alianza era necesaria para asegurar su futuro" dijo Beard. "¿Ahora qué va a hacer? ¿Va a seguir siendo una entidad independiente?", señaló.
Los directores de Liffe tomaron por unanimidad la decisión de aceptar la oferta de Euronext, Bolsa nacida de la alianza de los mercados de París, Bruselas y Amsterdam.
Londres había lanzado su OPA a 13,5 libras (3.577 pesetas) por acción, pero ante la reacción negativa del mercado, la consejera delegada de la Bolsa, Clara Furse, se vio obligada a subir su oferta hasta 19 libras (5.035 pesetas). Pagaba en acciones y efectivo, frente a las 18,5 libras (4.902 pesetas) en efectivo de Euronext. Según fuentes cercanas a Liffe, sus directivos no sólo consideraban más viable la estrategia a largo plazo de Euronext, sino que temían que una alianza con otro mercado londinense dejara a Liffe aislado en el contexto europeo.
Euronext también se ha comprometido a adoptar el sistema de negociación de contratos Connect, que fue desarrollado por Liffe. "Se trata de empresas comerciales pero que al mismo tiempo juegan un papel importante en la economía", dijo Beard. "Queremos conocer el significado más amplio de esta fusión".
Furse quiere echar tierra al tema de Liffe y se apresura a asegurar que Londres dispone de alternativas estratégicas viables. "La gente es bastante negativa y habla como si la fusión con Liffe hubiese sido un asunto de vida o muerte", dijo. "La verdad es que estamos hablando con varios socios potenciales. Todo es posible, desde alianzas y joint ventures hasta fusiones con otros mercados". Pero Furse se niega a entrar en detalles y el mercado sigue preguntándose si la Bolsa de Londres no habrá perdido el tren.