Aerolíneas suprime los vuelos entre Buenos Aires y Madrid
Las medidas de presión que la SEPI ejerce sobre los dos sindicatos díscolos de Aerolíneas, el de técnicos, APTA, y el de azafatas y sobrecargos, AAA, crece día a día. Ayer se suspendieron dos vuelos de Aerolíneas con origen en Buenos Aires y destino en Madrid, y quedó "aplazado" un vuelo en dirección contraria. A partir de mañana se cancela también la ruta entre España y Argentina. Además, la SEPI mantiene en España a la dirección de la compañía "en fase de consultas", sin fecha de regreso cierta a Buenos Aires.
La escalada de acontecimientos que arrastra a Aerolíneas hacia la quiebra no parece tener fin. Ayer se desencadenó un nuevo proceso de anulaciones y cancelaciones de vuelos entre Madrid y Buenos Aires, que culminará hoy con la salida del último vuelo entre la capital de España y la de Argentina. La ruta Buenos Aires-Madrid quedó interrumpida ayer. La SEPI argumentó que la causa de esta paralización era la falta de suministro de combustible, ya que Aerolíneas no puede seguir pagando.
Sin embargo, un portavoz de Repsol aseguró que la empresa va a seguir abasteciendo a los aviones de Aerolíneas mientras la empresa siga volando.
Fuentes de Aerolíneas informaron de que la reanudación de estos vuelos, así como la del resto de rutas canceladas la semana pasada serán "restablecidas de inmediato si APTA firma el Plan Director". El sindicato de aeronáuticos es, a su juicio, la clave de la resolución del conflicto.
A partir de mañana Aerolíneas tendrá canceladas todas las rutas internacionales a excepción de las que unen Buenos Aires con Montevideo, Caracas, Bolivia, Lima, Santa Cruz de la Sierra y Santiago de Chile.
En la escalada de presiones para que los sindicatos díscolos acepten el plan de salvamento de Aerolíneas, se ha incluido una medida de carácter bien diferente a las anteriores. El ente público español convocó a Madrid la semana pasada a la cúpula directiva de Aerolíneas que reside habitualmente en Buenos Aires.
Ha pasado casi una semana y estos ejecutivos permanecen en la capital de España. Fuentes de la empresa aseguran que su presencia aquí se debe a las "habituales evaluaciones que Emilio Cabrera (presidente de Aerolíneas) realiza normalmente con el accionista (la SEPI), consultas que se realizan cada cierto tiempo", y desmintieron que "no tengan previsto volver a Buenos Aires en tanto no se pacte una solución al conflicto". Fuentes argentinas, por su parte, aseguran que se trata de un aviso más del propietario español para demostrar que la paralización de Aerolíneas es irreversible, en caso de no alcanzar el deseado pacto.
Pero fuentes de la SEPI aseguran que "esto no es cierto, ya que lo que se pretende es la inmediata reanudación de los vuelos suspendidos momentáneamente por falta de fondos, lo cual, como ha dicho repetidamente Pedro Ferreras, se logrará en cuanto el sindicato de técnicos aeronáuticos acceda a firmar el Plan Director".
Las rutas que Aerolíneas suprimió la semana anterior son las que unen Buenos Aires con Nueva York, Miami, Los Ángeles, Auckland, Sidney, Río de Janeiro y São Paulo. Con la suspensión desde ayer de los vuelos a Madrid y su conexión con Roma, 9 de los 14 destinos internacionales de Aerolíneas han quedado suspendidos.
La situación en la capital argentina se complica día a día, con manifestaciones constantes de los trabajadores de la empresa y amplias muestras de solidaridad de la población con sus medidas de fuerza, a las que consideran una defensa de la aerolínea de bandera, lo que refuerza la dura posición sindical.
Un sindicato amenaza con impedir todos los de Argentina
El dirigente de la Asociación de Personal Aeronáutico (APA), Ariel Basteiro, amenazó ayer con paralizar todo el tráfico aéreo internacional de Argentina. "Si no vuela Aerolíneas Argentinas hacia el exterior, tampoco va a volar ninguna otra compañía extranjera ni a Buenos Aires ni desde Buenos Aires", aseguró Basteiro.
La amenaza fue lanzada poco después de que el Gobierno de Fernando de la Rúa transmitiera ayer un ultimátum a Aerolíneas Argentinas para que reanude los vuelos que canceló la semana pasada. "Tienen un plazo de 72 horas, a partir de hoy, para formular los descargos correspondientes", dijo el subsecretario de Transporte Aerocomercial, Daniel Hernández.
Fuentes de la SEPI dijeron que "la compañía ya está preparando su respuesta formal". Sin embargo, de hecho, esa contestación ya ha llegado con el anuncio de la suspensión de los vuelos de la empresa entre Argentina y España.
¿Qué ocurrirá si la compañía se niega a restablecer esas rutas? "Entonces, Aerolíneas virtualmente desaparecerá", dijo el lunes el ministro de Infraestructura de Argentina, Carlos Bastos. æpermil;ste, por encargo del ministro de Economía, Domingo Cavallo, prepara una licitación de esas rutas y su entrega a una sola compañía aérea, en lo que supondría la quiebra de hecho de Aerolíneas.
Para la diputada y dirigente sindical de aeronavegantes, Alicia Castro, "esa decisión forma parte de la estrategia de la SEPI de abandonar Aerolíneas. Ambos Gobiernos, que son los accionistas, se han unido para liquidar Aerolíneas".
El Gobierno también ha exigido a la APTA que se siente a negociar de inmediato con la SEPI. Pero las bases del sindicato han instado una y otra vez a su líder, Ricardo Cirielli, a que no firme el plan director si no se ofrecen garantías expresas de continuidad de Aerolíneas.