El apalancamiento y la liquidez, claves al operar a corto plazo
Una de las ventajas principales de los warrants radica en el apalancamiento y en la liquidez que estos productos ofrecen. Esto supone que un inversor, ante un movimiento de un índice del 2%, puede obtener con un warrant de elasticidad 10 veces un alza del 20% y, de forma inmediata, vender dicho warrant en Bolsa.
Esas dos cualidades de los warrants hacen de este instrumento una herramienta idónea para el actual momento de mercado donde se impone la operativa a corto. Un inversor que desee asumir un riesgo elevado a corto plazo (siempre limitando y controlando las pérdidas) utilizará warrants con vencimientos muy cercanos -entre tres y cuatro meses a vencimiento-, buscando un efecto elasticidad máximo. Utilizará, además, warrants que no estén muy OTM (en sus siglas en inglés, "fuera del dinero". Se dice que una opción está fuera del dinero si, ejerciéndola inmediatamente, no obtenemos beneficio) y cuyo diferencial de precios sea el mínimo posible.
Veamos un ejemplo. Supongamos un call warrant sobre el Dow Jones con strike 10.000 y un vencimiento en junio de 2001. Los detalles de precios y elasticidades serían los siguientes: spot, 10.250; precio, 0,81-0,82, y elasticidad, 866 veces.
Esto significa que, ante un incremento de un 1% del índice, el precio del warrant pasaría de los 0,81-0,82 a los 0,88-0,89. En este caso y, al existir liquidez siempre garantizada, el inversor podría deshacer su posición de inmediato.
Obviamente, un descenso de precios del Dow Jones provocaría un descenso del call warrant en las mismas proporciones explicadas. Conviene no olvidar que, en este caso, el horizonte temporal de la inversión debe controlarse en todo momento.
Si un inversor quiere operar en warrants asumiendo menos riesgo, deberá tomar vencimientos más lejanos, pero con un mismo tipo de strike, es decir, que no esté muy alejado del nivel spot de mercado.
Seguir una disciplina
En esta operativa de corto plazo es muy importante la fijación de niveles de entrada y, sobre todo, de salida o stop de protección. Es importante seguir una disciplina muy clara en el actual momento de mercado puesto que, una posición de beneficios puede pasar, rápidamente, a pérdidas que -amplificadas por el efecto apalancamiento- nos pueden sacar del mercado muy fácilmente.
En el caso español, conviene no perder de vista los niveles de referencia de soportes (9.350, 9.200 y 8.900 puntos) y los niveles de resistencia: 9.500, 9.800 y 10.150 puntos.