La inexistente gracia de la morosidad, y las obligaciones de los fabricantes de smartphones
Deber dinero no es divertido, y que se lo deban a uno, menos todavía
El humorista y dibujante Vázquez era un moroso recalcitrante, casi profesional de la cosa, un genio del engaño que se representaba a sí mismo en los tebeos. La mayoría de la gente, por suerte, no es así, y no deja de pagar hasta que no le queda otro remedio, sobre todo la hipoteca. Para prevenir los impagos, los bancos tienen equipos especializados que detectan un incremento del riesgo en los préstamos, y ahora los están reforzando, ante la perspectiva de que las sucesivas crisis de los últimos años (ya se ha perdido la cuenta) hagan finalmente mella en los hogares y las empresas españolas.
Los niveles de mora y de pre-mora han repuntado ligeramente en los últimos meses, señal de que se han agotado los ahorros de la pandemia y de que la inflación se va comiendo el poder adquisitivo de los sueldos, aunque la resistencia del empleo ha frenado hasta ahora el impacto. Hasta un 6,9% de los créditos concedidos están en vigilancia especial, la fase anterior a la mora como tal. Aunque los dibujos de Vázquez resultaban hilarantes, deber dinero no tiene ninguna gracia, y que se lo deban a uno, menos aún.
IAG prepara la discusión en Bruselas de la compra de Air Europa
El jefe de IAG, Luis Gallego, se reunió el viernes con Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, para contarle los potentes planes de inversión en España del grupo aéreo. Quizá aprovechó para explicarle la importancia de los vuelos, incluso los cortos, para el turismo y la economía españolas, mientras Sumar presiona para recortarlos, de forma más retórica que eficaz.
Por supuesto, abordó la pretendida compra de Air Europa, a la que vendría muy bien el apoyo del Ejecutivo español ante las autoridades de competencia de Bruselas, frente a los intereses de Air France o la alemana Lufthansa.
Los smartphones son básicos para la vida cotidiana, y eso conlleva obligaciones
Apple se ha ofrecido a abrir el chip NFC –el que permite hacer pagos en tiendas físicas por contacto– de los iPhone a sistemas competidores de Apple Pay. Ahora la Comisión Europea ha preguntado a estos si les parece suficiente.
La compañía ha preferido ceder ante las amenazas de sanción, aunque puede pensar que a nadie le obligan –normalmente– a comprar y utilizar los dispositivos de Apple. El problema es que las alternativas, como Android, también suelen estar plagadas de trampas monopolísticas, aunque quizá no tan flagrantes como la del NFC: suelen estar relacionadas con el software y no con el hardware. Dada la omnipresencia de los smartphones en la vida cotidiana, vigilar que sean compatibles con las tecnologías de terceros se ha vuelto algo básico.
La frase del día
“Estamos hablando demasiado de Donald Trump en Europa. Es hora de que los Gobiernos y las empresas europeas hagamos los deberes ante un posible segundo mandato suyo”
Christian Lindner, ministro de Economía de Alemania
El deporte, foco de la relación de Occidente con las dictaduras del Golfo
El deporte no es el único ámbito socioeconómico que hace negocios con Arabia Saudí u otras dictaduras de Oriente Próximo, pero acuerdos como el de Rafa Nadal para promocionar el país resultan especialmente llamativos, por los valores que se suelen atribuir a los jugadores de tenis y otras disciplinas. Se supone que el dinero es el principal motivo de estos contratos, pero a veces también se trata simplemente no quedarse con cara de tonto: es el caso de Jon Rahm, que fichó por el circuito saudí de golf después de que la propia PGA, la principal organización de ese deporte, anunciara que negociaba una alianza con su emergente rival. La esperanza de fondo es que esta incursión en el deporte acabe estimulando la perestroika de los regímenes del Golfo Pérsico.
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