Lecciones de Peter Lynch: cómo evitar los errores comunes de los inversores
Paciencia y visión a largo plazo
Peter Lynch es un inversor estadounidense, conocido por su impresionante desempeño como gestor del fondo Magellan en Fidelity Investments. Lynch comenzó su carrera en Fidelity en 1966 y se convirtió en el gestor del fondo Magellan en 1977. Durante su gestión, que duró hasta 1990, logró una rentabilidad anual promedio del +29% y anualizada del +17,4%, el doble que el índice S&P 500 que se revalorizó un +9% anualizado. Bajo su liderazgo, los activos del fondo crecieron de 18 millones de dólares a 14 mil millones.
Aunque a Peter Lynch se le considera un gestor de la escuela del Value Investing por su enfatización en la compra de empresas baratas, consideraba el retorno sobre el capital como un indicador clave para evaluar la eficiencia de una empresa en la generación de beneficios. Según Lynch, una empresa con un alto RoC es generalmente una buena inversión porque indica que la empresa está utilizando su capital de manera efectiva para generar beneficios.
Algunas de sus más célebres frases fueron:
- “Invierte en lo que conoces”.
- “El tiempo es amigo de los buenos negocios y el enemigo de los mediocres”.
- “Nadie puede prever los tipos de interés, la economía ni el mercado de valores”.
- “Más dinero se ha perdido tratando de anticipar la corrección que en la propia corrección”.
Sin embargo, aunque el fondo Magellan gestionado por Peter Lynch tuvo un rendimiento impresionante, con una rentabilidad anualizada del +17% entre 1977 y 1990, la mayoría de los inversores individuales del fondo no lograron obtener estos rendimientos, sino que fueron muy inferiores, incluso con pérdidas.
¿Cómo es posible que un fondo con una rentabilidad del +700% en 13 años tenga inversores que hayan perdido dinero?
La respuesta está en el comportamiento de los inversores que vendían en pánico en las caídas pensando que era el final del mundo, y compraban cuando la bolsa ya había subido y parecía que seguiría subiendo eternamente. En definitiva: el Market Timing.
El fondo, que invertía todo su patrimonio en renta variable estadounidense, aunque obtuvo una rentabilidad de +700% en 13 años, tuvo 2 caídas de valoración superior al 30% y otras dos caídas superiores al 40%.
Muchos inversores tienden a entrar y salir de los fondos en momentos inadecuados. Las decisiones basadas en emociones, como el miedo y la codicia, llevan a muchos inversores a tomar decisiones impulsivas que afectan muy negativamente a sus rendimientos, como debió ser el caso del movimiento de los clientes en el Fidelity Magellan.
A la hora de invertir nuestros ahorros, lo más importante es la planificación financiera de largo plazo. Los mercados financieros llevan ofreciendo rendimientos muy consistentes durante casi dos siglos. No hay motivo para pensar que, con los altibajos normales dependiendo del ciclo económico en el que nos encontremos, las bolsas volverán a ofrecer retornos anualizados de entre el +7% y el +10%, que supone batir ampliamente la inflación y doblar el patrimonio invertido cada 7 o 10 años.
Eso sí, si nos desviamos del plan de ahorro e inversión creyendo que somos capaces de predecir lo que va a hacer el mercado en el corto plazo, incrementaremos la probabilidad de cometer los mismos errores que cometieron aquellos inversores del Fidelity Magellan comprando arriba y vendiendo abajo.