El Ibex mantiene los 10.700 aunque limita las ganancias tras el IPC estadounidense
La inflación no despeja las dudas sobre la rebajas de tipos y el selectivo limita las ganancias al 0,3%
Las Bolsas reaccionaron este miércoles con contención al dato de inflación estadounidense. La tasa general se situó en el 2,9% interanual, y la subyacente en el 3,2%, en ambos casos una décima menos que en junio. La moderación estuvo en línea con lo esperado, muestra de que el proceso de desinflación sigue su curso, y pavimenta el camino a una bajada de tipos por parte de la Reserva Federal en su próxima reunión de septiembre, pero en los primeros compases fue insuficiente para animar a los inversores a aumentar sus posiciones. Tras su publicación, el Ibex 35 vio evaporarse parte de las ganancias de la jornada, y concluye con una subida del 0,27%, superando los 10.753, mientras que el Eurostoxx 50 redujo sus avances al 0,53%.
CaixaBank, Mapfre, Inditex y Puig lideraban las ganancias en el Ibex 35, con subidas que van desde el 1,35% hasta el 1,07%. Por abajo, Laboratorios Rovi y Acciona Energía se dejaba un 1,7% y un 1,27%, respectivamente. Tras la buena sesión del martes, los mercados vivieron una jornada de indefinición hasta que la estadística de inflación puso fin a las dudas, pero a diferencia de lo ocurrido durante la semana pasada, plagada de turbulencias, la volatilidad no hizo acto de presencia: se mantuvo a raya, y no hubo grandes bandazos al alza ni a la baja.
En Wall Street, que venía de haber firmado su mejor racha desde el pasado noviembre, tanto el S&P500 como el Dow Jones cotizaban con tímidas ganancias pasadas dos horas del toque de campana, y el Nasdaq sufría pequeñas pérdidas. Entre las tecnológicas, las firmas de chips ASML y Nvidia eran la cara, con avances que rondaban el 1%, y Google la cruz, tras la noticia de que el Departamento de Justicia podría obligar al grupo tecnológico a dividirse.
La espectacular recuperación que ha seguido al desastroso inicio de la semana pasada, el denominado lunes negro, ha devuelto a los índices a las cercanías de sus máximos históricos, un umbral del que al S&P500 apenas le separa un 4%. Aunque la inflación continúa el proceso de desaceleración, los datos conocidos en las últimas horas no terminan de despejar la intensidad de los recortes. Los analistas creen que la llave está ahora en manos del dato de empleo.
En Japón, la Bolsa apenas reaccionó al anuncio este miércoles del primer ministro, Fumio Kishida, de que dimitirá de su cargo al frente de su partido y del Ejecutivo con vistas a promover “un cambio” y “una renovación” en la formación gobernante. Aun así, el índice bursátil japonés se mantiene muy por encima de los mínimos alcanzados después de la ola de ventas masivas de la semana pasada. El índice MSCI de acciones de Asia-Pacífico fuera de Japón subió un 0,5%. Sin embargo, el Hang Seng de Hong Kong cayó un 0,4%.
La reacción tampoco fue visceral en los mercados de divisas y los de materias primas. La cotización del euro frente al dólar escaló hasta los 1,103 dólares, un 0,3% más, al persistir la idea de que la Fed rebajará el precio del dinero. Mientras que el crudo brent se dio la vuelta y se movía con ligeras pérdidas, del 0,51%, luchando por mantener los 80 dólares por barril. El crudo West Texas imitaba el movimiento, pero con más virulencia, y perdía casi un 1% hasta los 77,67 dólares. En el mercado de deuda, el interés exigido al bono español a 10 años bajaba hasta el 3,01%.
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