La cura funcional, la nueva estrategia para mantener a raya el VIH

Se busca que el sistema inmunitario controle el virus con una vacuna. La catalana Aelix desarrolla una terapéutica de células T

Jordi Naval, director general de Aelix.Marta Jordi

Controlar el VIH sin tomar medicación diariamente y sin miedo a que progrese la enfermedad o a infectar a otras personas gracias a una vacuna terapéutica. Es lo que se conoce como la cura funcional y “es la nueva frontera en virología”, afirma Jordi Naval (Barcelona, 1969), director general de Aelix. “El virus sigue latente, escondido, pero, a efectos prácticos, es como si estuvieses curado porque el propio sistema inmunitario lo controla y, en general, el objetivo es que la persona lleve una vida normal sin tomar más medicación”, explica por videoconferencia desde Dinamarca.

Esta biotecnológica catalana ha dado un paso de gigante “en un terreno enormemente complejo” al desarrollar una vacuna de células T que aumenta la respuesta inmune en las personas que viven con este virus. De hecho, en febrero pasado presentaron los resultados positivos de su ensayo Aelix-003, que confirman “la seguridad, tolerabilidad e inmunogenicidad y eficacia de su producto en combinación con el inmunomodulador vesatolimod, de la estadounidense Gilead, con la que mantiene una alianza en este desarrollo.

Somos la compañía biotecnológica con el producto más avanzado del mundo en esta área

Jordi Naval, director general

“El estudio 003 nos indica que nuestra vacuna es muy potente, muy inmunogénica. Los datos confirman que una proporción significativa de los participantes tratados con esta combinación controlaron el virus durante 24-30 semanas sin tomar antirretrovirales”, detalla Christian Brander (Suiza, 1967), director científico, también por video­llamada pero desde la sede de la empresa en Barcelona. El próximo paso de esta compañía, con 12 empleados, es el inicio, ya en marcha, de otro ensayo en España, el BCN 03, con 30 participantes, para probar su producto con otros inmunógenos y aumentar aún más la respuesta de los anticuerpos, indica Brander. Además de conocer en profundidad el papel del vesatolimod en este régimen, ya que todavía no han recabado toda la información del anterior estudio al ser reciente.

Líneas de estudio

En VIH, las nuevas estrategias de investigación se centran en dos grandes líneas: los antirretrovirales de larga duración y en la PrEP (profilaxis preexposición) y la cura funcional (vacunas terapéuticas solas o combinadas con inmunomoduladores o anticuerpos neutralizantes), señala Naval. “Hay una diferencia entre la vacuna preventiva, que es para evitar la infección, como la del Covid, y lo que hace Aelix, que es para inducir con una vacuna de células T una respuesta inmunitaria en la persona con VIH que mantenga a raya el virus”, sostiene, tras asegurar que es la biotecnológica con el producto más avanzado en este ámbito.

Además, dentro dicha estrategia, el plan de la compañía, surgida en 2015, es combinar su producto, la vacuna de células T, con el mencionado inmunomodulador de Gilead o los anticuerpos neutralizantes, concreta el directivo, que no se atreve a poner una fecha de lanzamiento.

Iniciaremos en breve otro ensayo para combinar nuestra vacuna con otros inmunógenos y aumentar aún más la respuesta de los anticuerpos

Christian Brander, director científico

“Tardará todavía algún tiempo; por algún motivo no se ha conseguido una vacuna preventiva en 40 años. El VIH es un virus que muta muy rápidamente y generar una respuesta inmunitaria con una vacuna que realmente sea capaz de controlarlo es enormemente complejo”, aduce. La compañía busca también que solo se administre una dosis. En el ensayo Aelix-002, presentado en 2022, se administraron ocho y en el 003, cuatro. “Tendremos que hacer más estudios para ver si será necesario una de refuerzo”, admite Brander.

Christian Brander, director científico de Aelix.Marta Jordi

Atractivo

Los prometedores resultados publicados por Aelix han hecho que crezca el interés por esta compañía, que desde su fundación cuenta con el apoyo de Ysios Capital Partners, Caixa Capital Risc, el fondo norteamericano 10K Lakes Capital y el CDTI, que se unió a este proyecto en 2020. “Estos inversores invirtieron 11,5 millones en 2015, cuando creamos la empresa, y han venido apoyando y soportando a la compañía durante todos estos años”, apunta Naval, que no divulga el monto invertido hasta la fecha ni tampoco el aportado por Gilead. “Es confidencial”, dice.

Aelix contempla una nueva ronda de financiación y la búsqueda de nuevos inversores para continuar con sus planes. Además de España, quieren hacer ensayos en EE UU e Italia. Sin embargo, reconocen que todavía no están preparados para embarcarse en uno de fase III, es decir, “en uno multinacional con miles personas y que cuesta por encima de 200 millones”, la última etapa antes de salir al mercado. “Hace falta una interacción más [las combinaciones que prueban este año]”, insiste.

Naval no descarta que esta empresa acabe en manos de una gran farmacéutica: “El destino habitual de firmas como Aelix es ser adquirida por una compañía farmacéutica global. Pero esto es positivo, porque tiene la capacidad y la estructura de desplegar y completar estudios en fase III, al igual que la comercialización y distribución de forma rápida y eficiente. En este proceso todo el mundo se beneficia”. Alrededor de 38 millones de personas viven con VIH, entre 140.000 y 170.000 en España.

Colaboración multidisciplinar

Centros. Nueve hospitales participaron en el ensayo Aelix-003, entre ellos, el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa del Hospital Germans Trias i Pujol, el Bellvitge, el Santa Creu i Sant Pau, el Clínic de Barcelona, el Vall d’Hebron, el Ramón y Cajal, el Gregorio Marañón y el de La Paz.

Tras la cura. Christian Brander confía, pese a los obstáculos, en que “podamos también, basados en el éxito de una cura funcional, desarrollar maneras de eliminar completamente el virus del cuerpo”. 

Alianzas. Sobre el apoyo de Gilead, Jordi Naval manifiesta la importancia de esta relación: “Son los que pueden aportar capital, conocimiento, nuevos productos; la colaboración ha sido y es muy fructífera y valiosa para Aelix, pero también para las personas que viven con VIH y el mundo de la salud”. 

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