El PP gana las elecciones pero Feijóo se queda lejos de la Moncloa
El PSOE resiste y mejora los resultados de 2019 en un escrutinio más ajustado de lo que las encuestas apuntaban
El Partido Popular gana las elecciones, pero un escrutinio mucho más ajustado del que se esperaba no le asegura la mayoría suficiente para gobernar ni con Vox a su lado. El PP es el partido más votado en los comicios generales de este 23 de julio con 136 diputados, con el 99,4% escrutado. La izquierda planta más cara de la que preveían las encuestas y el PSOE incluso mejora sus resultados de hace cuatro años, con 122 escaños. No hubo remontada, pero un nuevo ejemplo de resistencia protagonizado por Pedro Sánchez amarga la victoria a los populares.
Los 33 representantes que lograría Vox y los 31 que obtendría Sumar dejan muy lejos a ambos bloques del número clave de 176 de los 350 diputados del Congreso, aunque el PSOE podría buscar apoyos en otros grupos, como ya hizo Sánchez en la anterior legislatura, y roza esa cifra clave, aunque dependería de una abstención de Junts (y del apoyo de ERC, Bildu, PNV y BNG) para contar más votos a favor que en contra. La derecha se queda a siete asientos de la absoluta (a cinco, si UPN y CC se alinearan con Génova) y el fantasma de una repetición de elecciones, que es lo que más temían inversores y mundo económico en general, se asoma.
En la cita de noviembre de 2019, el PSOE sumó 120 diputados, el PP 89, Vox 52 y los partidos que ahora integran Sumar, 35.
En los primeros comicios para la Moncloa celebrados en pleno verano, la participación ha sido bastante superior a la de hace cuatro años con una cifra récord del voto por correo, que casi duplicó la de 2019. En torno al 70% de los españoles habían votado frente al 66,23% de 2019.
Los 14 escaños de diferencia entre PP y PSOE no se reflejan en el número y porcentaje del voto. El PP supera los 8 millones con el 33% de las papeletas mientras que los socialistas alcanzan los 7,7 millones y el 31,7%. Los populares mejoran trece puntos su noche electoral de 2019 y el PSOE también lo hace, en casi cuatro puntos.
Más allá de los cuatro grandes partidos, si hay un partido que se puede dar como gran perdedor de estas elecciones es ERC, que ha pasado de contar con 13 diputados en la Carrera de San Jerónimo a sólo lograr 7 con casi el 95% escrutado en esta autonomía. A Cataluña, precisamente, debe Ferraz gran parte de su buen resultado nacional, ya que el PSC alcanza nada menos que 19 diputados, siete más que en 2019. Sumar también tendría siete representantes, los mismos que los republicanos y Junts (uno menos). Sin Ciudadanos en la ecuación, el PP pasa de dos a seis y Vox mantiene sus dos escaños. La CUP se quedaría sin apoyos.
En el otro gran territorio nacionalista, en el País Vasco, y casi el 100% escrutado, El PSE también da aire a Ferraz, con cinco diputados, los mismos que PNV y Bildu (que suma otro más por Navarra). El PP consigue dos escaños (frente a uno en 2019) y Sumar, sólo uno.
Este panorama contrasta con el reflejado por los sondeos conocidos este mismo domingo, que se movían entre una absoluta entre PP y Vox (según Gad3) y una en la que sólo la rozaban (según Sigma Dos), pero ninguna otorgó al PSOE el resultado final.
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