El Banco de España pide un esfuerzo para converger en renta per cápita con la zona euro
Solicita un mayor peso relativo de la imposición sobre el consumo, revisar el gasto que suponen los beneficios fiscales y mejorar y elevar la fiscalidad medioambiental
Como viene sucediendo año tras año, el Banco de España presenta su informe anual en el que ofrece su valoración sobre la evolución pasada de la economía y ofrece su receta sobre el acontecer futuro de la misma. En un año marcado por una importante acumulación de perturbaciones negativas que han requerido la puesta en acción de diversas políticas económicas, subyace durante las últimas décadas como el crecimiento económico no ha sido suficiente para converger en el nivel de renta per cápita de la zona euro.
De hecho, se ha convertido en el principal reto a batir en el futuro, según se desprende del mensaje que transmite el Gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, en la presentación del Informe Anual de 2022 de la entidad. Si en 2005, la brecha negativa entre el nivel del PIB per cápita español y el de la UEM alcanzó su mínimo histórico reciente, 8,8%, y en 2019, antes del estallido de la pandemia era de un 13%, los datos referidos a 2022 lo sitúan en el 17%.
Una baja productividad y una reducida tasa de empleo son las dos causas que explicarían esta brecha, cuya convergencia debe producirse, sin que ello suponga un aumento de los desequilibrios macrofinancieros. Así el gobernador señala que desde el estallido de la crisis financiera global, la economía española ha mostrado un patrón de crecimiento que ha permitido una corrección parcial de los desequilibrios acumulados en la fase expansiva previa.
Vulnerabilidades estructurales
Advierte, no obstante, que permanecen algunas vulnerabilidades estructurales que condicionan las perspectivas y la sostenibilidad del crecimiento económico de cara al futuro. El principal el elevado nivel de endeudamiento público, que cerró 2022 en el 113% del PIB, 1,5 billones de euros, que desde que comenzase la actual crisis financiera ha crecido en más de 80 puntos su peso en el PIB, y que además se acompaña de un déficit público estructural considerable.
“Esta situación constituye una importante fuente de vulnerabilidad para nuestra economía, en particular en un contexto de endurecimiento de la política monetaria”, advierte el gobernador. No obstante señala que el empleo adecuado de los fondos europeos Next Generation UE, junto a un diseño, una implementación y evaluación “rigurosos y ambiciosos” de las reformas incluidas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) representan “una oportunidad histórica que no podemos desaprovechar”.
También insiste en la necesidad de poner en marcha ya en 2023 la implementación de un plan de consolidación fiscal que permita reducir gradualmente la vulnerabilidad, lo que contribuiría a recuperar el margen de maniobra de la política presupuestaria ante eventuales perturbaciones negativas en el futuro.
En la presentación del gobernador, reconoce que la actividad económica se ha mostrado más resistente de lo inicialmente previsto, y así en los meses transcurridos de 2023 ″se advierten señales de renovado dinamismo”. Al cierre de 2022 el crecimiento del PIB real alcanzó el 5,5% en España, frente al 3,5% de la zona euro, mientras que en el primer trimestre, conocido recientemente el ritmo del crecimiento intertrimestral alcanzó el 0,5%, en contraste con el 0,1% en el área del euro.
Revisión integral del sistema tributario
El gobernador contempla en su presentación que hace balance del pasado año 2022, que el ajuste fiscal debe ser también compatible con una mejora de la calidad de las finanzas públicas, con el propósito de incrementar su contribución al crecimiento potencial de la economía. Hernández de Cos considera “imprescindible” aumentar la eficiencia del gasto, de forma que se sea cuidadoso con el gasto en educación o sanidad, al ser vitales en el impulso del crecimiento y la igualdad de oportunidades.
Por el lado de los ingresos aboga por “una revisión integral del sistema tributario” para poner en marcha algunas de las medidas recogidas en el Libro Blanco sobre la Reforma Tributaria presentado en marzo de 2022, en concreto dar un mayor peso relativo a la imposición sobre el consumo, revisar el importante gasto que implican los beneficios fiscales (que cuantifica en unos 53.000 millones de euros), mejorar y elevar la fiscalidad medioambiental, así como incrementar la coordinación y armonización internacional del sistema tributario para afrontar la creciente digitalización y globalización. Todo ello en coordinación con otras medidas compensatorias y de ayuda para los más vulnerables.
Pese a que prácticamente puede decirse que la economía española ha recuperado el nivel prepandemia, lo cierto es que el PIB real se sitúa todavía 0,2 puntos por debajo del observado en el inicio del Covid, aunque 2,5 por encima de la zona euro. Para este año el Banco de España espera que la economía incremente su dinamismo en los próximos trimestres y pese a que en el conjunto de 2023, el avance se moderaría respecto a 2022, la aceleración progresiva de la actividad permitiría que el crecimiento del PIB superara el 2%, en promedio anual durante 2024 y 2025.
El PIB crecerá este año en torno al 2%
A la vista de las últimas revisiones del PIB en la serie histórica al alza llevadas a cabo por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el PIB real este año podría superar con creces el 1,6% previsto en las últimas proyecciones de la entidad, para situarse en el entorno del 2%. Y es que la disminución de las presiones inflacionistas, lo que acarrea una recuperación de la confianza y de las rentas reales y el despliegue de los fondos europeos, contribuirían a esta mejora, aunque seguirá amenazada por la duración de la guerra, que sigue siendo el principal riesgo para Europa.
Crecimiento del alquiler
Otro de los temas que el gobernador no quiere pasar por alto es el de la vivienda, un ámbito en el que según dice, se aprecia una especial vulnerabilidad en las condiciones de acceso a la vivienda, que se han endurecido en los últimos años, tanto en la compra como el alquiler. Respecto a la Ley de Vivienda, valora que se ponga un mayor énfasis en el necesario incremento de la oferta del alquiler, y en concreto el alquiler social a partir de una mayor colaboración público-privada.
Así señala que el mercado de vivienda residencial de alquiler en España ha experimentado un crecimiento muy significativo durante la última década que se ha traducido en un aumento neto estimado de 800.000 hogares y 2 millones de personas adicionales residiendo en una vivienda de alquiler entre 2011 y 2021, situándose en el 24,2% la ratio de hogares cuya vivienda habitual no es una propiedad. Un porcentaje que se sitúa por debajo del promedio de la UE-27 que se fija en el 30,1%, mientras que en la zona euro es del 34,2%.
Respecto a la medida del Gobierno de avalar hipotecas con créditos ICO, director general de Economía y Estadística del Banco de España, Ángel Gavilán, considera de que las medidas coyunturales, no son “una fórmula milagrosa para resolver los desajustes de acceso a la vivienda”, ya que se trata de un problema “estructural”. “Es un problema que tiene muchas aristas. No hay ninguna solución que lo resuelva de manera inmediata”, ha explicado Gavilán.
En el informe del Banco de España, se recoge que la tendencia de vivienda en propiedad en España ha caído mucho en los últimos años, sobre todo entre los jóvenes, y esto ha provocado “un aumento de la desigualdad”.
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