Toyota sufre en Bolsa por los aranceles de Trump y anuncia una previsión anual que disgusta al mercado
La compañía intenta ofrecer una visión más optimista para el resto del año, pero las cuentas ponen de relieve las repercusiones de los gravámenes

Las acciones de Toyota Motor han registrado este miércoles su mayor caída desde abril después de que las previsiones de beneficios anuales del fabricante de automóviles decepcionaran a los inversores, una señal de que los efectos de los aranceles del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, siguen pesando en sus resultados.
El mayor fabricante de automóviles del mundo dijo que espera obtener unos ingresos operativos de 3,4 billones de yenes (19.300 millones de euros) para el año fiscal que finaliza en marzo de 2026. Esto supone un aumento del 6% con respecto a su previsión anterior de 3,2 billones de yenes, aunque no alcanza las estimaciones de 3,9 billones de yenes de los analistas, lo que provocó una caída de las acciones en Tokio de hasta un 5%, si bien al cierre, la pérdida en Bolsa quedó en el 3,6%. La compañía explica que la buena evolución fuera de Estados Unidos puede ayudar a compensar el golpe arancelario en el país norteamericano.
Aunque Toyota intentó presentar una visión más optimista para el resto del año, los resultados pusieron de relieve las ya considerables repercusiones de los aranceles de Trump. En total, los ingresos operativos del primer semestre cayeron a 2 billones de yenes desde los aproximadamente 2,5 billones del año anterior, con una caída del 27% en el segundo trimestre.
En el primer semestre fiscal (de abril a septiembre) el grupo japonés recortó su beneficio neto atribuido en un 7% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta lograr unas ganancias de 1,77 billones de yenes (10.032 millones de euros).
Los aranceles estadounidenses han asestado un duro golpe a una industria del motor que ya se encontraba debilitada por la feroz competencia de los fabricantes chinos de vehículos eléctricos y por una transformación sin precedentes provocada por el avance de las nuevas tecnologías de conducción. Toyota estimó que los aranceles le costarían 1,45 billones de yenes en el presente ejercicio fiscal.
Los fabricantes de automóviles mundiales llevan meses advirtiendo de que se enfrentan a pérdidas de miles de millones de dólares debido a la guerra comercial, que ha llevado a las empresas a subir los precios, trasladar la producción a Estados Unidos o recortar la producción. Más recientemente, los indicios de distensión geopolítica y los acuerdos alcanzados con los principales socios comerciales han ofrecido al sector la claridad que tanto necesitaba para los próximos trimestres.
Los fabricantes de automóviles japoneses se enfrentan ahora a un arancel del 15% sobre los automóviles y las piezas de automóvil que exportan a Estados Unidos tras un acuerdo bilateral alcanzado en julio. Aunque se trata de un gran aumento con respecto a los aranceles anteriores del 2,5%, es mucho menos que el 25% con el que había amenazado Trump.
A pesar de las dificultades, Toyota registró unas ventas globales récord durante la primera mitad del año fiscal. Incluso está empezando a recuperar el terreno perdido en China, donde dominan las marcas nacionales de vehículos eléctricos lideradas por BYD, y ha logrado ganancias en Estados Unidos, a pesar de los aranceles de Trump.
“Las ventas aumentaron principalmente en Japón y Norteamérica a pesar del impacto de los aranceles estadounidenses”, declaró el director financiero Kenta Kon a los periodistas en Tokio. La proporción de vehículos electrificados, incluidos los vehículos eléctricos de batería y los híbridos de gasolina y electricidad, aumentó hasta el 47% durante el semestre, impulsada principalmente por las fuertes ventas de híbridos en Norteamérica y China, afirmó.
Mientras tanto, Toyota reiteró que no se enfrenta a ningún impacto inmediato en la producción por la escasez de componentes críticos del fabricante de chips Nexperia BV. Toyota está evaluando la gravedad de la situación, dijo Kon. “Toyota aún no se ha visto afectada, pero existe un riesgo”, explicó.

