“Sabemos que no es una buena noticia”: una comercializadora de Repsol comunica ya los recargos por el apagón
La firma Gana Energía señala en el recibo de sus consumidores que tiene que aplicarles una subida porque desde el 28 de abril Red Eléctrica opera de un modo más seguro que implica un “importante incremento de costes”

“Sabemos que no es una buena noticia”. Esta es una de las conclusiones que traslada Gana Energía, una comercializadora de luz de Repsol, a sus clientes minoristas en la factura eléctrica. Lo hace tras aplicarles un recargo de alrededor del 6% para sufragar los costes adicionales en que está incurriendo desde que Red Eléctrica opera el sistema con mayor seguridad. Según el recibo de un cliente de esta firma consultada por este medio, la empresa propiedad de la multinacional energética advierte que como consecuencia del apagón, su recibo al año pasará de unos 1.145 euros a alrededor de 1.218 euros. 73 euros más al año calculan que pagará este consumidor para evitar apagones.
Esta comercializadora de luz explica a sus clientes que este incremento se produce como consecuencia del apagón, el peor incidente del sistema eléctrico en la península Ibérica.
“Tras el apagón del 28 de abril, Red Eléctrica ha cambiado su forma de operar el sistema eléctrico para hacerlo más seguro. Este cambio consiste en usar más energía de respaldo (como los ciclos combinados, que son más estables pero más caros) y reducir la dependencia de las renovables. ¿El resultado? Un incremento importante de los costes técnicos del sistema, especialmente en los llamados servicios de ajuste. Un coste que todas las comercializadoras –también nosotros– debemos abonar a Red Eléctrica”, explica en los nuevos recibos la comercializadora de Repsol.
Además, añade que el recargo antiapagón no es algo exclusivo que haga esta firma: “De hecho, algunas comercializadoras ya han subido precios recientemente o van a tener que hacerlo a corto plazo”, advierten en la factura.
Para justificar la medida, Gana Energía explica que se han disparado el coste de los servicios de ajuste, un concepto que se paga en el término de energía. Estos servicios de ajuste son los ingresos que reciben las eléctricas por tener disponibles sus centrales de generación disponibles. Desde el apagón, Red Eléctrica requiere más centrales tradicionales disponibles, cuyos costes son más altos pero a priori son más seguras para evitar un corte de suministro como el ocurrido hace poco más de un mes.
Gana Energía estima que los servicios de ajuste han pasado de costar 7,82 euros por MWh en mayo 2022 a costar 9,86 euros por MWh en 2023. En mayo de 2024 costó 14,22 euros por MWh y este 2025, tras el blackout, se ha incrementado hasta los 27,52 euros por MWh. Esto significa que este concepto que pagan los 30 millones de consumidores de luz en España se ha disparado un 351% en tres año. Respecto al año pasado, el coste de estas restricciones técnicas son casi el doble. La comercializadoras, habitualmente, compran la energía sin cubrirse por este concepto; por eso ahora, se ven obligadas a repercutir este coste para no incurrir en pérdidas.
No obstante, fuentes del sector señalan que este es un riesgo que deben gestionar las comercializadoras y dudan de si puede repercutirse a los clientes minoristas. Es decir, si lo abonan los hogares, o si por el contrario las comercializadoras deben asumir este coste hasta que renueven sus contratos.
Por ahora, Repsol ha decidido que su comercializadora sí lo repercuta. Gana Energía explica en el recibo de la luz que “trabaja con márgenes muy ajustados. Esta situación nos obliga a modificar los precios para cubrir este sobrecoste derivado de la gestión de Red Eléctrica. Esperamos que sea una situación temporal y, una vez pase, podamos bajar los precios de tu tarifa”.
“Sabemos que no es una buena noticia. Tampoco es la que nos gustaría darte”, concluye la comercializadora, que informa a sus clientes de que tiene la posibilidad de rescindir su contrato y buscar otra comercializadora.
Como ya avanzó este medio el pasado 30 de abril, las comercializadoras ya están aplicando esta tasa antiapagón desde hace pocos días, pero se circunscribía a un ámbito de cliente pyme o industrial. Ahora la comercializadora de Repsol también incluye a los clientes minoristas en este recargo. Fuentes de Repsol aseguran que la comercializadora de luz de su matriz no aplica este recargo como hace su filial Gana Energía.
Diversas compañías de compraventa de luz independiente han protestado por tener que asumir este coste. Algunas de ellas reconocen que en el mes de mayo han terminado en pérdidas. Su principal incertidumbre es hasta cuándo durará esta operación reforzada de Red Eléctrica. Ni el Gobierno ni el operador del sistema eléctrico han puesto un horizonte.
La preocupación por esta cuestión ha saltado del sector energético al mundo político. Según desveló este medio, el grupo parlamentario de Sumar ha lanzado una batería de preguntas parlamentarias para pedir explicaciones al Gobierno. El socio minoritario de la coalición pide explicaciones al Ministerio para la Transición Ecológica y le pregunta por qué este coste no lo acaban suportando las grandes compañías.
La cuestión no es baladí, porque este recargo antiapagón puede acabar suponiendo varios miles de millones de euros de sobrecoste si la operativa de seguridad reforzada se extiende en el tiempo. El sector de las comercializadoras se queja de que el fuerte incremento de los servicios de ajuste son ingresos a mayores para las grandes eléctricas, que pueden lanzar campañas más agresivas y minar aún más un mercado muy concentrado en las grandes compañías. Un nuevo golpe después de que sufrieran las consecuencias de la crisis energética derivada de la invasión de Ucrania.