La china BYD acentúa la guerra contra Tesla: vende coches eléctricos inteligentes a menos de 9.700 euros
La acción del fabricante de motor toca máximos históricos
![Modelo Seagull de BYD en la feria de coches de Shanghai, China.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/K4JCBWVLO6SXKTRASEOQTN4YQM.jpg?auth=57b2edf4cfb4991910eaeea58505b63cf531145f0192b5fe54cc3853f554dfd3&width=414)
El fabricante chino de automóviles BYD ha anunciado que ha comenzado a ofrecer funciones avanzadas de conducción autónoma en la mayoría de sus modelos, incluidos los que se venden a menos de 10.000 dólares (9.700 euros), un precio mucho más barato que la oferta de competidores como Tesla, en una medida que, según los analistas, puede iniciar una nueva guerra de precios. BYD también planea integrar el software de DeepSeek, la startup china que sorprendió a los mercados el mes pasado con su modelo de inteligencia artificial de código abierto, dijo el lunes la automovilística, sin especificar cuándo ni cómo sucedería. Las acciones de BYD llegaron a subir un 4,5% hasta un máximo histórico al comienzo de la jornada de Hong Kong, elevando su valor de mercado a 132.000 millones de dólares, más que Ford Motor, General Motors y Stellantis juntas, según recoge Bloomberg. La acción acumuló un alza del 21% la semana pasada en previsión de este evento del lunes.
El gigante de los vehículos eléctricos ha equipado todos sus modelos de la marca BYD con un precio superior a los 100.000 yuanes (13.251 euros) con el sistema avanzado de asistencia a la conducción God’s Eye, propiedad de la empresa, dijo el fundador de BYD, Wang Chuanfu, en un evento retransmitido en directo desde Shenzhen. Además ha instalado el sistema en tres modelos de precio inferior a 100.000 yuanes, el más barato de los cuales es el Seagull, de 69.800 yuanes (9.250 euros). Estos modelos, 21 en total, empezaron a venderse justo después del evento. Según Wang, se trata del “primer lote” de automóviles.
Hasta ahora, BYD solo ofrecía estas funciones, que permiten a los automóviles circular por autopistas de forma autónoma bajo la supervisión de un conductor humano, en modelos a partir de 30.000 dólares (29.000 euros). Tesla ofrece estas funciones en China en sus vehículos eléctricos a partir de 32.000 dólares (31.000 euros). La medida para democratizar las funciones de conducción avanzadas podría ayudar a BYD, que vendió más de 4 millones de vehículos el año pasado, a ampliar la brecha con Tesla y sus rivales nacionales como Xpeng y el gigante de los teléfonos inteligentes Xiaomi, que no han podido poner esa tecnología a disposición en vehículos de menor costo. Este año “será el primero de conducción inteligente para todos”, dijo el presidente de BYD, Wang Chuanfu, en el evento del lunes en la sede de la empresa. “Se convertirá en algo imprescindible en los próximos dos o tres años, al igual que un cinturón de seguridad o un airbag”.
Algunas marcas chinas de vehículos eléctricos, como MONA, de Xpeng, y Leapmotor, socio de Stellantis, también han lanzado vehículos eléctricos asequibles con funciones de conducción inteligente, el más barato hasta ahora era el Baojun Yunhai de 15.000 dólares de SAIC-General Motors-Wuling.
Aunque la conducción asistida es uno de los principales campos de batalla de los fabricantes de automóviles en China, los vehículos con características similares de sus rivales suelen venderse por más de 150.000 yuanes (19.900 euros) y algunos fabricantes cobran tarifas adicionales para habilitar la tecnología. Tesla, que está esperando la aprobación de Pekín para poner en marcha pruebas de funciones que comercializa como conducción autónoma total pero que requieren una supervisión constante, cobra 99 dólares al mes en Estados Unidos.
“La mayor revelación de BYD es que quieren igualar el derecho a la tecnología. La tecnología no tiene por qué ser de gama alta y aquí pueden librar una guerra de precios”, dijo Yale Zhang, director gerente de la empresa tecnológica Automotive Foresight.
“Es un poco como DeepSeek”, dijo, refiriéndose a la startup china de inteligencia artificial que sacudió los mercados mundiales el mes pasado al revelar que había construido sus modelos de IA a una fracción del costo de los gigantes tecnológicos occidentales.
John Zeng, responsable de previsiones de mercado para China de la consultora GlobalData, con sede en Londres, dijo que el paso a la conducción inteligente era probablemente un reconocimiento por parte de BYD de que sus ventas, que alcanzaron los 4 millones de unidades el año pasado, se habían estancado y que necesitaba un gran avance. En su opinión, la conducción inteligente “llevará sus ventas a un nuevo nivel”.
El sistema God’s Eye, que se presentó por primera vez en 2023, se basa en cámaras y sensores de radar para ayudar a los conductores con funciones que incluyen servicio de parking, velocidad de crucero y frenado automático. China, el mercado automovilístico más grande del mundo, ha adoptado funciones de asistencia al conductor de una manera que pocos otros lugares lo han hecho, y la mayoría de los fabricantes de automóviles ofrecen tecnología que se encuentra entre el nivel 2 y 3, lo que brinda a los conductores ciertos grados de asistencia con tareas como la dirección y el frenado.