Transportes da margen a Renfe para negociar con la futura Talgo la sanción por los trenes Avril
El ministro Óscar Puente reitera en Londres la prioridad de mantener la españolidad del fabricante
El nuevo presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, va a tener margen de maniobra para aliviar la carga que se cierne sobre Talgo, por el retraso en la entrega de los trenes de alta velocidad Avril, cuando se produzca la esperada entrada de un accionista de perfil industrial en el capital del fabricante. La apuesta del Gobierno para tomar las riendas de Talgo es de sobre conocida, la siderúrgica vasca Sidenor, y el ministro de Transportes, Óscar Puente, ha declarado esta mañana en Londes que existe “todo el margen que se quiera”, según ha recogido Efe, para que el próximo accionista de referencia de Talgo negocie con Fernández Heredia.
La operadora ferroviaria pública reclama 116 millones de euros por los casi dos años de demora en la entrada en su flota de los 30 Avril encargados entre 2016 y 2017. Se trata de una sanción que viene avalada por el contrato y a la que Renfe planea añadir otros 50 millones por el lucro cesante que resulta de no haber contado antes con ese material rodante. El ministro Puente sí ha dejado claro en su intervención ante los medios que “los contratos hay que cumplirlos”.
La millonaria penalización de Renfe sobre Talgo por el contrato de los Avril es una losa para que José Antonio Jainaga, presidente de Sidenor, suba el precio de compra. La posibilidad de negociar, abierta por Puente, ya sea sobre cantidades o plazos, podría servir de aliciente para que la compradora pueda aproximarse a las pretensiones del hoy primer accionist, Trilantic.
El ministerio de Transportes lleva un año controlando el destino del 29% del capital de Talgo puesto en venta por el fondo británico. El pasado agosto el Ejecutivo vetó una oferta pública de adquisición lanzada por el consorcio húngaro Ganz Mavag y ahora, junto al Gobierno vasco, interviene en las conversaciones entre Trilantic y la citada Sidenor. De hecho, ambas administraciones han manifestado su disposición a acompañar a la vasca con fondos públicos en la compra de una participación de referencia de Talgo.
El plan de Transportes pasaba por que Sidenor pudiera cerrar un acuerdo de adquisición el pasado mes de noviembre, pero las diferencias sobre el precio han dilatado un pacto que Óscar Puente quiere ver resuelto a lo largo de este enero. Sidenor estaba dispuesta a pagar 4 euros por acción, mientras que Trilantic pide los 5 euros que fueron fijados en la opa frustrada. La semana pasada se produjo un encuentro entre la siderúrgica y el primer accionista de Talgo, al que también asistieron representantes de Transportes y del Gobierno vasco, para tratar de encontrar una vía de entendimiento.
Óscar Puente, de visita en Reino Unido para ofrecer la colaboración del sector ferroviario español para el desarrollo del ferrocarril en ese país, ha reconocido que hay muchas opciones sobre el futuro de Talgo abiertas sobre la mesa, pero que la prioridad del Gobierno es que se llegue a una resolución que mantenga la españolidad de la empresa y de sus decisiones industriales. El Ejecutivo vasco ha reclamado la oposición del Gobierno de Pedro Sánchez a una eventual oferta polaca, por parte del fabricante Pesa, para evitar la marcha de producción de las plantas de Rivabellosa (Álava) y Las Matas (Madrid).